Discurso pronunciado por la Dra. Silvia Nonna
Acto de colación de grado del día 31 de octubre de 2024
Buenas tardes, graduadas, graduados.
Les doy la bienvenida a quienes han llegado a este Salón de Actos
de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires por primera vez, a
quienes están compartiendo de manera presencial y a quienes también lo están
compartiendo de manera virtual.
En general, todos los discursos de colación comienzan con un
agradecimiento a las autoridades por poder dar ese discurso. Yo también quiero
agradecer en esta oportunidad, el poder estar no solamente compartiendo con
ustedes un momento tan importante, sino además para poder darles esta última
charla que les prometo será breve y no necesitan tomar apuntes.
En pocos momentos ustedes van a estar recibiendo un diploma
que acredita que han completado de manera exitosa y completa la carrera que
eligieron para cursar esta Facultad.
88 abogadas, 61 abogados, 6 traductoras, a las traductoras
agradecemos que tienden puentes y ayudan a entender y a comunicarnos, 3 profesoras
para la enseñanza media y superior en ciencia jurídica, tremendo desafío
comenzar a formar en una época o en una etapa tan fundamental, y 4 diplomas de
Honor, a 1 abogada y 3 abogados.
Ustedes llevan en ese título muchas horas de estudio, muchos
trabajos prácticos, ahora podría decir muchas horas en lo virtual. También
llevan y sin ninguna duda, muchas alegrías algún sinsabor, pero además en ese
título lo que llevan y tengan plena conciencia que es así, llevan relaciones
que al entablado en estos años de estudio, relaciones de amistad y por
supuesto, también en el título está el acompañamiento de familiares, de
docentes, de profesores y de nodocentes que con su tarea silenciosa en la parte
administrativa, les permite a ustedes cubrir desde una inscripción hasta la
emisión de este diploma que van a llevar.
Y se van a comprometer a ajustar su profesión a los dictados
de la moral, a respetar y hacer respetar la Constitución Nacional y las instituciones
republicanas y democráticas. Y a trabajar para la dignidad de las personas y
los derechos humanos.
Van a asumir un compromiso que realmente es un desafío. Es
un honor y un privilegio llevar un título de la Universidad de Buenos Aires, de
las mejores universidades del mundo, de la Facultad de Derecho de la Universidad
de Buenos Aires, de las mejores facultades del mundo, una Facultad pública,
democrática, inclusiva, con libertad de cátedra, pluralista, que sin ninguna
duda le va a abrir muchísimas puertas, tanto en nuestro país sea aquí, sea en
alguna de las provincias como a nivel internacional.
Y yo no quiero cargarlos con el compromiso, pero sepan que
ustedes nos van a representar, ustedes representan a esta Facultad.
Asegurándoles que como les dije, se le van a abrir muchas puertas. Siempre las
mejores puertas, pero ustedes tienen que realmente hacer mérito para merecer
este título que hoy van a estar llevando.
Sientan orgullo por el título que llevan y por la Facultad y
la Universidad de la que egresan. Porque son graduadas, son graduados, y cuando
tomen su título estarán egresando de esta Facultad. Pero yo les digo que
regresen. Aquí tienen muchísimas posibilidades y distintas oportunidades para
hacer una especialización, una maestría, el doctorado, programas de
actualización, diplomaturas, vuelvan a la biblioteca, no hay una biblioteca
como la que tenemos nosotros.
Vuelvan a tomar un café y anímense a la enseñanza, no hay
nada más gratificante de poder compartir y transmitir los conocimientos que han
adquirido y que van a seguir adquiriendo, porque van a tomar nuevos rumbos.
Cada uno le va dar una nueva impronta a la profesión para la que con mucha
dedicación nos hemos dedicado ofrecerles a ustedes.
Así que enhorabuena, felicitaciones.
Las esperamos, los esperamos y el aplauso es para ustedes.