Discurso pronunciado por la Dra. Viviana Kluger

Acto de colación de grado del día 1 de diciembre de 2022

Viviana Kluger

Viviana Kluger

Buenas tardes a todos y todas, autoridades de la Facultad, profesores y profesoras, alumnos y alumnas, familiares.

Quiero agradecer, en primer lugar, al señor decano el Dr. Leandro Vergara por haberme concedido el honor de dirigirme a los graduados y graduadas en este día tan importante para ellos y para esta facultad de la que egresan.

Estimados graduados y graduadas, llegaron, prueba superada, en esta maratón han alcanzado la meta.

Atrás han quedado, por ahora, las noches sin dormir, los nervios de los exámenes, las extenuantes jornadas con la pila de libros arriba del escritorio, las postergaciones, las ausencias con aviso a las reuniones familiares y de amigos y amigas, por esos cursos a los que había que asistir, por esos trabajos en equipo, por ese examen que se acercaba y que había que preparar.

La familia, los compañeros y compañeras, los profesores y profesoras, las amistades hemos estado al lado de ustedes apoyándolos, estimulándolos, diciéndoles que todo era posible si se esforzaban, si se comprometían, si se dedicaban, muchos y muchas de ustedes probablemente ya tengan pensado que ruta van a tomar, y tal vez otros y otras se estén preguntando ¿Qué se viene ahora?, creo que la respuesta es; ahora se abre un abanico de múltiples posibilidades, un variopinto mundo de puertas que van apareciendo.

Nosotros como Facultad somos, como en la Universidad de Bolonia, la primera Universidad, una agrupación de maestros y alumnos, un núcleo de aprendizaje y difusión de saberes y como docentes, y tal como señalaba el Dr. Atilio Alterini eximio profesor que fuera decano de nuestra Facultad, nuestra misión ha sido la de encaminarlos hacia la búsqueda y la reflexión.

Hemos procurado darles las herramientas para comenzar a abrirse camino, ahora les toca a ustedes explorar como aplicarlas. Habrán quienes tengan la oportunidad de elegir dónde colocarse, mientras que habrá quienes tendrán que ubicarse hasta que les llegue la posibilidad de optar, pero hasta que llegue ese momento habrá que aprovechar cada circunstancia y sacarle el mejor crédito, porque tal vez, quien sabe, al tarea diaria en un área en la que no esperaban desempeñarse termina haciendo que amen aquello que no tenían previsto.

Afortunadamente y sobre todo en nuestro país, y gracias a las habilidades que se desarrollan en la carrera, la graduación en leyes proporciona una preparación que les permite insertarse en diversos ámbitos profesionales. Tradicionalmente quienes egresaban de la carrera de abogacía solo podían desempeñarse en el país en el que habían estudiado, pero hoy en día las fronteras se han desdibujado y el graduado o graduada en leyes puede posicionarse más allá de los límites de su país, en organismos internacionales como las Naciones Unidas, la Organización Mundial de Comercio, en tribunales internacionales como el CIADI, en estudios jurídicos interdisciplinarios, en empresas internacionales. Ello porque nosotros en la carrera no sólo les hemos enseñado nuestros códigos, sino también las claves para poder comprender otros sistemas jurídicos.

Habrá quienes elegirán o se les presentará la oportunidad de desempeñarse en el sector público, como por ejemplo en la Justicia, en el Ministerio Público, en la Administración Pública Nacional, Provincial o Municipal, en los ministerios, dictaminando, representando al Estado, a la provincia, al municipio, asesorando, sumariando, en empresas del Estado, representando a nuestro país en organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y una larga lista de entidades.

Otros y otras se decantarán por el sector privado, litigando, patrocinando, asesorando empresas, como perito en diversas áreas de especialización, como síndicos en concursos y quiebras, participarán en negociaciones extrajudiciales, en mediaciones, en arbitrajes, tanto como árbitros o en el asesoramiento y representación de las partes.

Habrá quienes abracen la docencia y contribuyan a formar nuevas generaciones de profesionales y, sobre todo ojalá, muchos de ustedes se dediquen a la investigación, tan necesaria en nuestras universidades, porque como dijo el profesor Miguel Ángel Ciuro Caldani, una Universidad que no investiga está condenada a ser importadora de saberes generados fuera de sus confines.

El Derecho necesita de la investigación que contribuya a la producción doctrinaria y a la innovación en el campo académico, que aporte hacia la solución de un problema que el Derecho aún no haya podido resolver, que con su producto genere los cambios que la sociedad demanda, investigadores e investigadoras que se constituyan en juristas cuya producción se transfiera al ámbito de los tribunales, que contribuyan a generar un derecho positivo que reconozca el dinamismo social.

Habrá quienes se dediquen a la política, como dirigentes, como integrantes del Poder Legislativo o asesorando a políticos, como artífices de políticas públicas, como agentes de reformas legislativas imprescindibles.

En definitiva, quienes salgan de las aulas de las escuelas de derecho serán, en última instancia, quienes diseñen el orden jurídico.

Más allá de la posición profesional en la que ustedes se ubiquen, no pierdan nunca de vista que el derecho se transforma constantemente y que minuto a minuto, día a día, van surgiendo nuevas ramas o nuevos enfoques dentro de una misma rama, que pueden ser objeto de estudio o de desempeño profesional, como el medio ambiente, los derechos humanos, las cuestiones de género, el comercio electrónico, el derecho de las inversiones, entre otras.

Estimados graduados y graduadas, cuantas posibilidades, cuantos universos se abren a partir de ahora, vayan en su búsqueda, explórenlos, háganlos suyos, el mundo es de ustedes, en esta búsqueda no se alejen nunca de nuestra Facultad, no se vayan nunca, quédense siempre cerca de nosotros, porque siempre serán bienvenidos, y lo más importante y lo que les quiero dejar hoy, es que elijan lo que elijan, ejerzan esta carrera con compromiso social, con entrega a nuestro país, que actúen con transparencia, que prioricen la ética, que se pongan en el lugar del otro u otra, que crezcan profesionalmente, que estén abiertos y abiertas a los cambios, que se animen a cruzar el puente como decía Yuval Harari, que se pongan las gafas de otro color, que escuchen, que tengan curiosidad, que nunca dejen de aprender, que continúen formándose, que busquen la motivación en cada cosa y sobre todo que no pierdan nunca las ilusiones y los sueños, y no se olviden del rol tan primordial que van a tener en esta sociedad, porque muchas personas van a depender de ustedes, de vuestras sabias palabras, de vuestros puntos de vista, porque en definitiva el abogado y abogada tienen en la mano el poder de cambiar la vida de las personas.

Felicitaciones a todos y todas, abran sus alas y comiencen a volar, gracias.