Discurso pronunciado por el Dr. Roald Devetac
Acto de colación de grado del día 6 de diciembre de 2017
Buenas tardes, señora Secretaria Académica, profesores, docentes, graduados, familiares, señoras y señores, permítanme antes de dirigirme a los graduados tres breves referencias: En primer lugar, agradezco a las autoridades que me confieren el honor de dirigir estas palabras en esta ceremonia de graduación de suma importancia para cada uno de ustedes y también para la Facultad.
En segundo término, quiero expresar que mis palabras surgen de mi doble condición de abogado pero principalmente en mi condición de profesor, del profesorado en Ciencias Jurídicas de esta Facultad que a mi entender es la más completa y mejor propuesta de formación docente que posee la Universidad de Buenos Aires. Por último, siento que debemos felicitar también a todos los familiares y amigos de los graduados que están aquí hoy presentes y algunas personas que tal vez hoy no puedan estar presentes ya que seguramente han sido muy importantes en este trayecto de formación por el apoyo y el acompañamiento que les han brindado, y ahora sí, queridos graduados, flamantes colegas, además de felicitarlos por sus logros , por el esfuerzo, el trabajo, la dedicación y el tiempo dedicado a sus estudios que hoy les permiten culminar el trayecto de formación universitaria con éxito, deseo compartir con ustedes unas breves reflexiones desde dos ángulos distintos: El primero, relacionado con una variable o dimensión sustancial en nuestras vidas, el tiempo, asumiendo el presupuesto de Paul Ricoeur en tiempo y narración, no podemos desconocer el carácter temporal de la experiencia humana, el tiempo se hace tiempo en cuanto se articula de modo narrativo, a su vez, la narración es significativa en la medida en que se describe los rasgos de la experiencia temporal, y en este momento, para encuadrar vuestra experiencia humana y temporal en relación a este trayecto formativo, no podemos escapar a la clásica segmentación o caracterización del tiempo en pasado, presente y futuro.
En la mirada del pasado, volvemos a cada uno de nosotros, y muy especialmente de ustedes, los egresados, para recordar aquel momento en el cual tomaron la decisión de ser abogados, profesores en Ciencias Jurídicas, traductores o calígrafos, ¿qué los movilizó? ¿qué los motivó? ¿qué los interesó? E inmediatamente, otra decisión importante tuvieron que resolver, donde estudiar, y rememorando el momento de aquella decisión no pueden menos hoy que estar plenamente satisfechos, por haber elegido estudiar en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, de la que egresan orgullosos del título que en minutos más van a poseer en sus manos. Decisión correcta que hoy les permite egresar de una de las mejores Facultades de Derecho en nuestro país y de una Universidad con un amplio reconocimiento internacional; y nos paramos en un presente, en el que finalizan el proceso de aprendizaje formal de los estudios de grado, lo que podemos denominar como las etapas de la enseñanza y la formación para pasar a la etapa profesional.
Se encuentran en un momento importante de sus vidas, realizando un pasaje de la condición de estudiantes a la condición de profesionales, de ser alumnos de esta querida Facultad a incorporarse a otros espacios en los cuales desarrollaran en primera instancia su profesión, y cambiaran los vínculos entre compañeros de estudios para estar entre colegas que desempeñan su profesión y esto es ahora, ya, pero también, existe un futuro próximo y tantos futuros más lejanos a lo largo de sus vidas en los cuales ustedes se van a desempeñar como abogados en un estudio, en la judicatura como fiscales, defensores, jueces, en órganos del estado como funcionarios, como asesores, como legisladores, podrán desempeñarse y así lo deseo en tareas de enseñanza y de investigación, hacer una carrera académica o la vida les deparara alguna otra sorpresa profesional que hoy no podemos contemplar, el diploma, que en momentos más van a recibir les abrirá múltiples puertas, pero más allá de cual sea el rol profesional que cada uno pueda desempeñar, lo significativo es como lo van hacer, y allí lo importante es que lo hagan con la máxima responsabilidad personal, profesional y social enmarcados en los dictados del saber teórico y práctico que han adquirido y que deberán seguir adquiriendo pero encuadrado siempre en los principios de la ética profesional y personal que como profesionales y esencialmente como ciudadanos se encuentran obligados a cumplir, por otro lado la segunda perspectiva nos lleva a otra breve reflexión, prontamente ustedes juraran por el respeto a la Constitución Nacional y por el respeto a las instituciones democráticas y republicanas, como abogado, como profesor y como ciudadano me preocupa que nuestra sociedad no se muestra interesada ni preocupada por la existencia y por el cumplimiento de las normas, porque la misma sociedad no valore la normativa y las instituciones vigentes, porque a veces no se valore la verdad y la justicia, porque tal vez, también las instituciones al decir de François Dubet estén en un proceso declive.
Un prestigioso colega egresado de esta casa de estudios, el doctor Carlos Nino, en su texto un país al margen de la ley hace referencia a la tendencia social, a la ajuridicidad , a la centralidad de la nomia y a una ceguera normativa. No comparto con ustedes estas apreciaciones desde una mirada negativa, sino por el contrario, convencido e ilusionado en poder ayudarlos a intentar cambiar esta situación desde el accionar de su futuro profesional. Que mayor desafío para cada uno de ustedes, como profesionales del derecho, que velar por el cumplimiento de la Constitución Nacional y de todo el plexo normativo y hacer respetar las instituciones democráticas y republicanas, no es solo una formula la que van a cumplimentar, es un sentir, es un deber, es una obligación.
Estimados egresados, flamantes colegas, el tiempo del pasado ya se fue, en este presente inmediato disfruten de este momento que seguramente no olvidaran a lo largo de sus vidas y sepan que tienen por delante un futuro que les auguro venturoso de ejercicio profesional, pero no olviden que por sobre todas las cosas, son personas, intenten ser buenas personas y como tales sepan honrar el título que ahora van a recibir.
Muchas gracias.