Discurso pronunciado por el Dr. Pablo Revilla
Acto de colación de grado del día 1 de julio de 2016
Pablo Revilla
Buenas tardes a todos los presentes.
Me pidieron que fuera breve y voy a tratar de cumplir de la mejor forma posible. Cuando hace unos días el Sr. Subsecretario Académico me trasmitió la invitación para tomar la palabra y dirigirme a ustedes ahora, luego de aceptar con mucho gusto la tarea, pensé en que tenía para decirles, sobre todo a los egresados este día, cuando veo caras conocidas que no me esperaba encontrar.
Lo primero que quiero hacer es validar el sentimiento que deben tener ustedes en este momento. Terminaron. Ya está, es un logro muy importante en sus vidas. Y esa sensación de alivio que deben sentir en este momento es absolutamente fundada y cierta. Es un logro que los va a acompañar toda la vida. Y felicitaciones de mi parte.
Dicho esto, cuatro reflexiones sobre este momento tan importante que vamos a compartir. Una primera reflexión respecto a nuestra querida Facultad, nuestra querida Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires. Universidad pública, laica y gratuita. Aunque esto último es algo engañoso, porque de gratuita no tiene nada, porque está financiada con los recursos de las rentas generales de la nación; y como ya vimos en la materia Finanzas Públicas y Derecho Tributario son los contribuyentes los que han pagado la carrera que ustedes cursaron, y nunca deben olvidar que tienen como egresados una enorme deuda de gratitud a esos ciudadanos que les pagaron los estudios. Nuestra facultad creo que debe y puede seguir siendo aprovechada por ustedes. Por amor a ella, que seguramente la tienen, y es un sentimiento que se va acrecentando con el correr de los tiempos; pero también por conveniencia, ya que fue y sigue siendo un ámbito propicio para que cada uno de ustedes organice y planifique sus conocimientos. Cada año se ofrecen aquí una enorme multitud de carreras de posgrado, de cursos de actualización, conferencias, jornadas, charlas debate; que ustedes van a poder usar para ampliar y profundizar su capacitación profesional. Nuestra Facultad ha sido siempre un ámbito amable e inclusivo. Los hemos hecho entre todos, con el esfuerzo de muchas personas que, por suerte, pensamos distinto. Y esta diversidad nos enriquece, nos nutre, nos fortalece; y tenemos que hacer lo posible por mantenerla.
La segunda reflexión es sobre el futuro. No olviden que el derecho es algo cambiante, algo mutante, que requiere de permanente actualización. Por eso, yo creo que es útil pensar que esta finalización de la carrera de grado es un paso más, un paso muy importante, pero no es la culminación del saber. Se abre una nueva etapa en la vida de ustedes, que es la vida profesional. Que tiene sus retos, en cualquiera sea el ámbito que les toque desempeñarse. No se dejen caer en el ostracismo, traten de permanecer activos y actualizados para poder brindar los servicios de excelencia en un entorno que cada vez es más competitivo.
La tercera reflexión que quería dejarles hoy es respecto de la familia y de los afectos. No dejen pasar esta oportunidad para agradecer a la familia y a los afectos de cada uno de ustedes. Seguro que este momento es muy importante para ustedes, pero también lo es para las respectivas familias y los seres queridos. El apoyo, la paciencia, el esfuerzo que han realizado junto a ustedes merece ser recompensado en este momento y merece un festejo con ellos y por ellos.
Y la última reflexión, para terminar, respecto del país. Porque este es un momento muy especial. Faltan 9 días para que celebremos los 200años de la independencia de nuestro país. Que el esfuerzo de aquellos patriotas, hace 200 años, no haya sido en vano. Estos diplomas que ahora van a recibir les van a permitir desempeñar un nuevo rol en la vida social argentina. Por favor, hagan lo posible para que esta Facultad de Derecho pueda enorgullecerse de contarlos entre sus egresados.
Muchas gracias.