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Año XI - Edición 204 22 de noviembre de 2012

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Programa “Género y Derecho” - Primer encuentro nacional de la Asociación de Mujeres Penalistas de Argentina

  • Nota de Tapa

En el marco del Programa “Género y Derecho” de esta Facultad, el 2 de noviembre tuvo lugar en el Salón Rojo el Primer encuentro nacional de la Asociación de Mujeres Penalistas de Argentina, que contó con las palabras de bienvenida de la Dra. Lucila Larrandart (Directora del Departamento de Derecho Penal y Criminología de la Facultad de Derecho, UBA) y la Ab. Mariana Barbitta (Presidenta de AMPA).

Para comenzar, la Dra. Lucila Larrandart aseguró que “un espacio que tenga por objeto mostrar ciertas formas de discriminación con el fin de terminar con ciertas prácticas siempre debe ser bienvenido”. Precisó también que en la cuestión del género, no debe mostrarse a la mujer como víctima para no terminar reforzando el rol estereotipado de la mujer. De tal modo, brindó su experiencia en el concurso de ingreso como ayudante en la carrera docente durante el año 1970 en la cátedra de Derecho penal II, parte especial. Recordó que no había mujeres en la docencia del derecho penal en aquella época y se tuvo en cuenta los resultados por pedido expreso del titular de cátedra.

Finalmente, destacó que el intercambio de experiencias permite encarar investigaciones de género en el ámbito del derecho penal

Por su parte, la Ab. Mariana Barbitta indicó que con el esfuerzo de muchas energías se puede lograr un colectivo capaz de generar un espacio de diálogo y de compromiso. Describió que AMPA surgió a partir de haber detectado algunas prácticas en el litigio que evidencian un trato desigual entre hombres y mujeres, impactando en el ejercicio de la profesión. Reconoció que históricamente, el derecho penal es un territorio de hombres y son pocas las mujeres que lo ejercen. Sin embargo, advirtió que se generaba una práctica desigual dentro del Poder Judicial, el Ministerio Público Fiscal y las Defensorías. Así, se fueron sumando distintas mujeres que trabajan en el ámbito público para generar un espacio de solidaridad, una red que pueda nuclear distintas mujeres que les apasiona el derecho penal y emprender así un camino de esfuerzo compartido.

A continuación, se desarrollaron talleres de debate y trabajo sobre las experiencias de mujeres en litigio penal a cargo de distintos coordinadores de AMPA.

Posteriormente, en el marco del Programa “Género y Derecho” se llevó a cabo el panel de cierre "La mujer en el litigio penal. El abordaje desde las distintas funciones profesionales", integrado por las Dras. Mónica Pinto (Decana de la Facultad de Derecho, UBA), María Laura Garrigós de Rebori (Jueza, integrante de la Sala V de la Cámara Nacional de Apelaciones de la Capital Federal) y Marta Nercellas (abogada penalista). Coordinó el panel Carolina Maglione (AMPA).

La primera en tomar la palabra fue la Decana Mónica Pinto, quien agradeció dentro del Programa “Género y Derecho” a las mujeres de AMPA y observó que a las mujeres dela Facultad les hacía falta tener un espacio para hablar. Detalló que actualmentela UBA cuenta con el 60,40% de estudiantes de grado y 58,20% de estudiantes de posgrado que son mujeres. Asimismo, señaló que estas cifras no quieren decir que las mujeres tengan las mismas oportunidades para llegar a posiciones importantes. Sin embargo, comentó quela Facultad de Derecho, que siempre fue un lugar generoso con las mujeres respecto a los profesores titulares, no tiene profesoras titulares en varias materias.

Por su parte, la Dra. María Laura Garrigós de Rebori manifestó que los edificios no están preparados para las mujeres y que recién ahora las mujeres están ocupando los espacios públicos. “Según el mapa dela Corte Suprema de Justicia dela Nación, el 54% del Poder Judicial son mujeres, pero con el cargo de Secretario para abajo”, expresó. Así, subrayó que antes se luchaba por la igualdad y legislativamente se ha avanzado, pero instó a un cambio de paradigma: “que se visualice que las mujeres somos diferentes de los hombres con otros problemas de igual entidad que la de los hombres”. En la relación de poder, entendió que todavía la mujer es la parte débil de la ecuación, por ello se las vincula con mayor capacidad de igualdad y democracia. También observó que en el ámbito penal, las mujeres se masculinizan. Consideró necesario revisar la legislación y nuestra vida con el enfoque de género.

Marta Nercellas opinó que los abogados están acostumbrados a hablar del problema del otro, del que confió su conflicto para resolver su conflicto. Hizo alusión también a que en sus experiencias profesionales siempre trató de saltear los obstáculos y problemas, por eso no veía situaciones cotidianas de discriminación de género. Se refirió, asimismo, a su formación sobre la imagen de lo que es hombre y mujer. “La moral de los abogados penalistas tiene que ver con la ética de la libertad”, manifestó. Para concluir, ofreció su ayuda y experiencia a quienes están intentando lograr esta unión.

“Un espacio que tenga por objeto mostrar ciertas formas de discriminación con el fin de terminar con ciertas prácticas siempre debe ser bienvenido”, aseguró la Dra. Lucila Larrandart.