I Congreso Internacional de Pedagogía Universitaria
Durante los días 7, 8 y 9 de septiembre se efectuó en el Salón de Actos de la Facultad de Derecho el I Congreso Internacional de Pedagogía Universitaria que contó con la presencia de representantes de 91 Universidades de Argentina y del exterior (Bolivia, Brasil, Ecuador, España, Israel, Italia, México, Uruguay y Venezuela) con la intención de crear un espacio para la reflexión, el análisis y la discusión sobre la cuestión pedagógica en las Casas de Estudios superiores de los distintos países.
El acto de apertura del Congreso estuvo a cargo del Director Ejecutivo de la Unidad de Planificación Estratégica de la Educación del Ministerio de Educación, Lic. Juan Carlos Tedesco; el Vicedecano de la Facultad de Derecho, Dr. Tulio Ortiz; el Rector de la UBA, Dr. Rubén Hallú; la Secretaria de Asuntos Académicos de la UBA, Dra. Edith Litwin; y el Secretario General de la UBA, Carlos Mas Velez.
Tras agradecer en nombre suyo y de toda la comunidad universitaria y dar la bienvenida a los presentes, el Vicedecano Dr. Tulio Ortiz afirmó que el hecho de que el primer Congreso Internacional de Pedagogía Universitaria se haya realizado en esta Casa de Estudios “es muy significativo porque la Facultad se ha adherido firmemente a la idea de educar y formar docentes”.
A su turno, la Dra. Edith Litwin explicó que el Comité Científico, encargado de receptar, analizar y elegir los informes de experiencias e investigación en materia de pedagogía por los representantes de las distintas Universidades, aceptó el 70% de los trabajos presentados para ser expuestos en el Congreso, ubicándolos en grupos temáticos que pertenecen a distintas disciplinas. “Dichos grupos intercambiarán opiniones y discutirán experiencias permitiendo un mayor debate”.
Finalmente, dijo que “tenemos la esperanza de que esta primera experiencia nos permita un encuentro fructífero de ideas e intercambios facilitando a los investigadores, profesores y docentes de la región, una plataforma que aliente nuestros mejores pensamientos y decisiones para el futuro de la Universidad”.
A continuación, Juan Carlos Tedesco felicitó a la Universidad de Buenos Aires por reconocer la relevancia que tiene haber convocado este Congreso que da prioridad a una línea de trabajo que recupera la idea de la pedagogía universitaria y que “el éxito de esta convocatoria revela que esta temática ocupa la atención de profesores universitarios e investigadores en educación”. En consecuencia, habló sobre los hechos de deserción escolar en la enseñanza secundaria, circunstancias que se hacen cada vez más comunes en ese nivel de educación y es por esto que se convierte en esencial el cometido de evitar que este triste contexto alcance el nivel máximo de educación, que son las Universidades. Es por ello que estos hechos traen como consecuencia la inevitable reflexión sobre la pedagogía universitaria.
Concluyendo, indicó que el desafió no es sólo acompañar estas ideas, ya que es necesario volver a ver como se forma a los universitarios y técnicos, acarreando esta tarea una responsabilidad muy fuerte, con el objetivo común de construir una sociedad más justa.
En último turno, el Rector Dr. Rubén Hallú se refirió a los sujetos de formación, aclarando que “la palabra maestro denota más que profesión docente, una actitud, un liderazgo generoso que obliga a renovarse de modo constante y aprender de las respuestas del discípulo”, esto conlleva a la formación de un vínculo complejo e interactivo entre personas con plenos derechos y responsabilidades, como lo son el maestro, por un lado, y el discípulo, por otro, generando nuevos conocimientos. En la misma línea, entendió que “discípulo es un término que reconoce a un par en potencia, a un sujeto convocado a continuar y profundizar en un futuro que tiene muchas más incertidumbres que certezas, el desarrollo de la ciencia y la profesión en la que se está formando”.
Por otra parte, aseguró que el maestro no sólo se queda con la misión de formar futuros técnicos o profesionales, sino que, al mismo tiempo, forma maestros ya que el futuro profesional necesariamente no se involucre en la actividad académica, “sino porque en el ejercicio de su disciplina y también de su vida social habrá de actuar con maestría y generosidad”.
El acto de clausura, realizado el 9 de septiembre, estuvo presidido por la Vicerrectora de la UBA, Dra. María Beatriz Guglielmotti; acompañada en el estrado por el Decano de la Facultad de Derecho, Dr. Atilio A. Alterini; la Secretaria de Asuntos Académicos de la UBA, Dra. Edith Litwin; y la Profesora Consulta de la UBA, Lic. Lidia Fernández.
El Decano de nuestra Facultad, Dr. Atilio A. Alterini, comentó los principios de autonomía y autarquía establecidos por nuestra Carta Magna para las Universidades Nacionales cuyos efectos son de aplicación a las Universidades Públicas y a las que tienen el modelo argentino, que nace en 1918 con la reforma, “fenómeno de mayor extensión en el siglo XX”. Asimismo, comentó que la Universidad está dedicada a la investigación, enseñanza y extensión, y es este Congreso el que marca el sendero de los que vendrán. También consideró que “es conveniente que lo hagamos desde la función universitaria porque si bien tenemos la función de analizar los problemas, a la sociedad, a la realidad, es bueno que nos miremos hacia dentro y reflexionemos sobre nosotros mismos”.
A su turno, la Lic. Lidia Fernández destacó la importancia del Congreso respecto al sentido y razón del interés por la recuperación de la esencia y significado de nuestra construcción, sobretodo en países latinoamericanos que han tenido historias tan fragmentadas e interrumpidas, el hecho de “hacer memoria, y es una obligación de los intelectuales ayudar a esta”. De este modo, entendió que decimos que un hecho se convierte en un acontecimiento cuando impacta en la vida de los sujetos produciendo un espacio en que se posibilita vislumbrar aquello que es una realidad cotidiana y, como parte de este, se originan procesos de cambios “o, por lo menos, conciencia sobre las cuestiones de la propia vida que provocan malestar y a veces sufrimiento y que se desean transformar”.
Luego, expresó que en un momento determinado surgió la idea de realizar un encuentro, por medio de talleres, donde la gente se encontrara a conversar acerca de lo que hacían, manifestándose así el diseño embrionario del taller interdisciplinario de discusión de experiencias alrededor de un eje, sumándose posteriormente la idea de exposición de pósters, siempre con el objetivo común de buscar el impacto de estos acontecimientos.
Del mismo modo, recordó que la idea de aquel momento fue poner a la Universidad en un espacio internacional, realizándose en el 2008 un encuentro, antecedente inmediato de este Congreso, en el que se receptó otra innovación que fue la de no exponer los trabajos, “sino que estos se leen antes y se discuten e intercambian en el taller, convirtiéndose en un espacio de producción entre colegas”.
Subrayó la profundización que hubo y la introducción de dos espacios nuevos: los simposios institucionales y de profesores, y las mesas de comunicación con comentaristas. Asimismo, afirmó que “son muchos los que dicen haber encontrado en estos tres días nuevos compañeros en la ruta de concretar intenciones y proyectos, teniendo más certeza de haber participado todos juntos en un acontecimiento”.
A continuación, la Dra. Edith Litwin expresó su agradecimiento a los que posibilitaron la realización del evento.
En último turno, la Dra. María Beatriz Guglielmotti evocó las palabras que la Dra. Litwin expresó en la carta de presentación del Congreso remarcando que “se ha iniciado el sendero para la esperanza de que este espacio para la reflexión, el análisis y el debate permitan a la comunidad universitaria hacer suya la voz de Bernardo Houssay y tantos otros que aspiraron a que la Universidad fuera un laboratorio de ideas, productora de las mejores prácticas y formadora de los mejores profesionales que nuestro país requiere”.