Encuentro de Derechos Humanos con Mary Beloff
Encuentro de Derechos Humanos con Mary Beloff
El pasado 4 de septiembre en la Sala Vélez Sarsfield el Centro de Derechos Humanos (CDH) llevó adelante el Encuentro de Derechos Humanos con Mary Beloff, durante el cual compartió su experiencia de trabajo en la defensa y promoción de derechos humanos desde el ámbito académico, judicial y mediante su participación como asesora en distintos organismos internacionales.
Cabe destacar que la oradora es abogada por la UBA, máster por la Universidad de Harvard y doctora en Derecho por la UBA. Es profesora titular regular de Derecho Penal y Procesal Penal en la Facultad. Asimismo, es profesora en cursos de Posgrado en la Facultad, en la Universidad de Palermo, en la Universidad de la Plata y en la UNSAM. Actualmente, es fiscal general de Política Criminal, Derechos Humanos y Servicios a la Comunidad de la Procuración General de la Nación.
Tras una introducción por parte del director del CDH, Martín Sigal, la profesora Beloff manifestó: “Cuando era joven siempre pensé que mi carrera iba a ser una carrera dedicada al servicio público y en esa época derechos humanos no era un área de especificidad profesional”. Más adelante, contó que es egresada del Colegio Nacional de Buenos Aires que en esos años entrenaba a los alumnos con un altísimo concepto de sí mismos dado que el ingreso era muy difícil. “Yo venía con una formación caracterizada por tres elementos: esfuerzo, ambición y consideración del valor que uno tiene para poder lograr las cosas que se propone”, compartió. Luego, expresó que ingresó a la Facultad en el año que se implementa el Ciclo Básico Común. “Si uno tenía alguna duda vocacional el CBC le facilitó todo, porque no es lo mismo dar un examen de ingreso que entrar al CBC que es flexible”, describió.
Más tarde, dirigiéndose a los asistentes la profesora les aconsejó que busquen maestros. “No por los temas, porque a veces puede ser que lo encuentren en una materia que no sea una materia que les atraiga necesariamente. Pero sí pregunten quiénes enseñan bien, qué cursos toman sus compañeros que los hacen ser personas diferentes y mejores cuando terminan esa materia. Esa es la pregunta, los contenidos los pueden leer ustedes”, reflexionó y subrayó que lo que hace la diferencia en la formación es un buen maestro porque les enseña no solo los contenidos, sino todo lo demás, que es lo más importante.
Seguidamente, se enfocó en su carrera dentro del derecho penal. “La época en la que yo empecé mi carrera los juzgados de instrucción decían ‘acá no se aceptan mujeres’ directamente”, recordó y enfatizó que es muy positivo que hoy no se tenga que pasar por eso y resaltó que en ese punto se mejoró mucho.
Hacia el final, se refirió a la línea profesional que le brindó más alegrías que fue trabajar en el proceso de incorporación de las normas de derechos humanos que se habían empezado a aprobar en todos los países latinoamericanos y que tenían un impacto directo en la justicia penal, en las cuestiones de género y, sobre todo, en la cuestiones de los derechos de los niños en los países latinoamericanos.