IX Jornadas Intercátedras de Derecho Administrativo
Contratos administrativos
Carlos Balbín, Ernesto A. Marcer y Fernando García Pullés
Carlos Balbín, Ernesto A. Marcer y Fernando García Pullés
Silvia Nonna, Tomás-Ramón Fernández Rodríguez y Nélida Cervona
Silvia Nonna, Tomás-Ramón Fernández Rodríguez y Nélida Cervona
Durante los días 2 y 3 de noviembre se desarrollaron las IX Jornadas Intercátedras de Derecho Administrativo, las cuales tuvieron como temática los contratos administrativos.
El primer día, las jornadas se realizaron en el Salón Azul y empezaron con las palabras de apertura del profesor Ernesto A. Marcer. Posteriormente se dio paso a dos paneles: el primero de ellos contó con las exposiciones de Juan O. Gauna, Carlos Delpiazzo, Justo Reyna y Daniel Soria; mientras que en el segundo panel intervinieron Juan Carlos Cassagne, Tomás Hutchinson, Agustín Gordillo y Jorge Sáenz.
Luego, se hizo entrega del doctorado Honoris Causa de la UBA al profesor Tomás-Ramón Fernández Rodríguez. La ceremonia fue presidida por Nélida Cervone, vicerrectora de la UBA, quien fue acompañada por la secretaria académica de la Facultad de Derecho, Silvia Nonna y los titulares de las cátedras de Derecho Administrativo, Carlos Balbín, Ernesto A. Marcer, Fernando García Pullés y Guido S. Tawil. Este último tuvo a su cargo la laudatio académica. Con relación al homenajeado, mencionó que nació en Burgos en 1941, en una de las etapas más críticas de la España moderna. Remarcó que en la década del ’50 en ese país se generó un nuevo derecho administrativo. “Una generación de nóveles profesores había iniciado el cambio de estructuras básicas de la vieja España y el creciente interés de los jóvenes por el derecho administrativo así lo demostraba. Fue en ese particular contexto y en gran parte gracias al azar que el joven Tomás-Ramón conoció el derecho administrativo en las aulas de Valladolid”, destacó. Tawil hizo mención de la notable trayectoria académica de Fernández Rodríguez e indicó que la relación entre arbitrariedad y discrecionalidad ha sido la cuestión a la que Fernández Rodríguez le prestó mayor atención. Posteriormente se le hizo entrega del título y de la medalla de la UBA. Tras esto, se inició la conferencia de investidura de Tomás-Ramón Fernández Rodríguez, quien agradeció la distinción y se refirió al poder discrecional y las resoluciones arbitrarias, a las que muchas veces da lugar su ejercicio. “Aunque el adjetivo arbitrario se hace inevitablemente presente tanto en la creación, como en la interpretación y la aplicación del derecho (…) es en el ámbito del poder discrecional de la administración donde su inquietante sombra nunca se disipa del todo”, expresó. En este sentido, es allí precisamente donde resulta más necesario concretar sus perfiles, con el fin de acotar con la deseable precisión los límites de lo jurídicamente aceptable. “La célebre distinción que hizo Baldo hace ya entre siete siglos entre una potestas ordinaria, hoy decimos potestad reglada, y una potestas extraordinaria o ab lege soluta, libre de la ley, se ha perpetuado bajo otros nombres hasta nuestros días”, sostuvo y añadió: “Así son las cosas con carácter general no solo en el derecho continental europeo, que es el hábitat del derecho administrativo que conocemos, sino también en el derecho anglosajón, en el que el punto de partida es el mismo, la vieja distinción de Bracton entre gobernaculum y iurisdicio”, afirmó.
El día 3 de noviembre se llevó a cabo una reunión abierta de las Cátedras de Derecho Administrativo con los profesores Tomás-Ramón Fernández Rodríguez y Juan Ramón Fernández Torres. La jornada continuó con un panel compuesto por Alfredo Gusman (Las causales habilitantes para la contratación directa), Orlando Javier Moreno (Las partes en el Contrato Administrativo), María Josefina Rotaeche (Contratación estratégica) y Federico Campolieti (La cláusula arbitral en el contrato administrativo).
El siguiente panel contó con la participación de María Rosa Cilurzo (La excepción de incumplimiento), Juan Gustavo Corvalán (Autonomía de la voluntad y contrato administrativo), María Paula Rennella (El riesgo empresario y su regulación, con especial referencia a la colaboración público-privada) y Susana E. Vega (Ampliación de obra, trabajos adicionales, obras complementarias, error de proyecto en el contrato de obra pública).
El cierre de las jornadas estuvo a cargo de los profesores titulares en Derecho Administrativo. Para comenzar, Fernando García Pullés invitó a reflexionar sobre algunas cuestiones para interpretar. “En los últimos 40 años, he visto concepciones de contrato administrativo totalmente diversas, administraciones de contrato administrativo totalmente diversas y manejos de la realidad política y la finalidad de los contratos administrativos totalmente diversas. El contrato administrativo es un concepto unívoco, el problema es que tiene varias finalidades”, manifestó. Luego, Ernesto A. Marcer explicó que los legisladores, desde el siglo XIX, establecieron en nuestro país un sistema de dualidad de normas y crearon normas específicas, que no son las que se tienen en cuenta en las vinculaciones entre particulares. Por último, Guido Tawil opinó que el derecho administrativo, hace ya un par de décadas, ha comenzado a revisar conceptos, conceptos que eran considerados míticos, tales como el procedimiento administrativo y el tema de las formas. “Tenemos que salir de la visión estática y entrar en la realidad de la instituciones, tratar de entender para qué sirve cada cosa”, añadió.