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Año XV - Edición 265 05 de mayo de 2016

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Ateneo de casos "Condena errada"

  • Nota de Tapa

El 13 de abril en el Salón Rojo tuvo lugar el ateneo de casos Condena errada, en cuyo marco Justin Brooks,codirector de California Innocence Project, y Enrique Piñeyro, fundador de Innocence Project Argentina, compartieron sus experiencias a partir del trabajo que ambas organizaciones llevan adelante en casos de condenas erradas y causas armadas. La actividad estuvo destinada a mostrar, a partir del trabajo en casos reales, las causas que producen que el sistema penal obre con error condenando a personas inocentes y las formas en que esos errores pueden evitarse. El evento fue convocado por Innocence Project Argentina y el Centro de Derechos Humanos de la Facultad (CDH).

Para empezar, Liliana Ronconi, investigadora del CDH, dio la bienvenida y realizó los correspondientes agradecimientos. “El CDH quiere poner el foco en el desarrollo de habilidades por parte de los profesionales de esta casa y esta actividad está en línea con este objetivo que tiene el Centro. Quiere promover el desarrollo de habilidades en la defensa de los derechos humanos”, remarcó.

De esta manera, Justin Brooks explicó que el proyecto Inocencia de California es una clínica legal. El proyecto tiene tres misiones. Por un lado, conseguir la libertad de los inocentes en la cárcel. Además, proporcionar una experiencia educativa para los estudiantes. “Mis estudiantes trabajan de 20 a 30 horas cada semana en la clínica con sus propios casos”, añadió. El tercer objetivo es promover las formas en el sistema de justicia para mejorar el sistema y disminuir el número de inocentes que va a la cárcel. Asimismo, manifestó que poseen numerosos proyectos en los distintos estados de EE.UU. “También tenemos proyectos en Ámsterdam, Canadá, Inglaterra, Francia, Irlanda, Israel, Italia, –tenemos un proyecto nuevo en Japón–, Nueva Zelanda, Taiwán, Chile, Colombia, México, aquí en Argentina y Puerto Rico. Tenemos proyectos en todo el mundo porque este programa no es un programa solo de Estados Unidos, es un programa universal”, mencionó. En este sentido, afirmó que hay inocentes en la cárcel en todos los países ya que no hay un sistema perfecto. “Hay mejores y peores pero no hay sistemas perfectos”, entendió. Informó que los proyectos han liberado cientos de personas en los últimos quince años. Brooks subrayó que el trabajo de su organización es diferente al de otros defensores porque “todos nuestros casos están basados en hechos de inocencia. Este proyecto está después de tribunales, después de las apelaciones. Nosotros somos la última parada para un caso”. De esta manera, solo si poseen pruebas fuertes de inocencia es posible la liberación de sus clientes. “Nosotros tenemos todo tipo de casos: homicidios, violaciones, robos”, indicó, y adicionó que cada año reciben más de 1500 casos cada año. De esta forma, comentó: “California tiene más gente en la cárcel que Argentina y Estados Unidos tiene más gente en la cárcel que China”. Hizo mención de la importancia de que los estudiantes entrevisten a sus clientes en la primera semana del caso. “Es importante que los estudiantes entiendan que es una persona en la cárcel”, agregó.

Posteriormente, Enrique Piñeyro propuso “dejar de leer el Código Penal y empiecen a leer las cosas que escriben los jueces en los fallos, porque son antológicas y esta es la gente que luego viene a dar clases”. De esta manera hizo referencia a que luego de la liberación de Fernando Carrera, cuya historia es narrada en la película El Rati Horror Show, comenzó a recibir llamados de personas que se encontraban en igual situación. “Me encontré con Justin, fuimos con Manuel Garrido, que es ahora el presidente de Innocence Project Argentina, y en los montones de seminarios de Innocence Project que pudimos ir, la experiencia es reveladora. Es un problema mundial, los sistemas penales, los gobierno y los países no contemplan que hay inocentes presos”, remarcó. Así, examinó que no hay ningún programa o comisión orientada a liberar inocentes presos. “Hay un montón de programas antiimpunidad, pero proinocencia no hay ninguno. (…) El éxito de cualquier proyecto de inocencia es su propia disolución, porque se va a terminar el día en que los estados acepten que están poniendo inocentes presos y acepten que lo están haciendo de un estándar de valoración de prueba y admisión de error nulo”, remarcó. Así, estimó que la falta de rigor es escandalosa. Seguidamente, aseveró que la sensación que tiene es que los abogados en Argentina son “escritores compulsivos y fotocopiadores seriales”. Del mismo modo, invitó a recorrer las cárceles. “La verdad es que el panorama es muy desolador”, concluyó.