XIX Jornadas Científicas de la Magistratura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Durante los días 28 y 29 de octubre se realizaron en nuestra Facultad las “XIX Jornadas Científicas de la Magistratura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, que fue honrada con la presencia de la Vicepresidenta de la Corte Suprema Dra. Elena I. Highton de Nolasco; el Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Ing. Mauricio Macri; la Presidenta del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la Dra. Ana María Conde; la Defensora General de la Nación, la Dra. Stella Maris Martínez; el Presidente del Consejo de la Magistratura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Dr. Mauricio Devoto; el Ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Dr. Guillermo Montenegro; el Presidente de las Cortes y Superiores Tribunales de Justicia de las Provincias Argentinas y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Dr. Rafael Francisco Gutiérrez; el Presidente de la Federación Argentina de la Magistratura; el Dr. Abel Fleming; en representación de la Presidencia del Consejo de Procuradores, Fiscales, Defensores y Asesores de la Republica Argentina, el Dr. Agustín Basso; el Presidente del Colegio de Magistrados, el Dr. Marcelo Pablo Vázquez; y, en representación de la Presidencia del Colegio Federal de Política Criminal, el Dr. Darío Vesaro.
En primer lugar, la Dra. Ana María Conde subrayó que en éstas jornadas se ha privilegiado el tratamiento responsable de temas que hacen a la construcción de un Poder Judicial independiente y suficiente, y “estamos para reflexionar, junto a los magistrados y funcionarios judiciales de todo el país, con quienes intentaremos, a partir del dialogo y del intercambio de experiencias, analizar de manera constructiva las problemáticas de nuestra actividad”.
Por su parte, añadió que es una realidad incontrastable que la sociedad va cambiando con el trascurso del tiempo y es necesario adaptarse a esos cambios, que modifican el esquema tradicional de los tribunales preparados básicamente para dar respuesta al conflicto individual.
No obstante, expresó que se atribuyen, al Poder Judicial, funciones y responsabilidades que escapan a su rol especifico, por ende nunca se debe perder de vista la vigencia del principio republicano de división de poderes, así “como el poder administrador y el poder legislativo no puede arrogarse funciones jurisdiccionales, los jueces no podemos gobernar a través de las sentencias, fijando políticas de Estado, ni crear normas legales, porque representamos al pueblo sólo de forma indirecta”.
Finalmente, destacó que los magistrados y funcionarios judiciales “son los verdaderos artífices de la construcción del Poder Judicial que la sociedad reclama y debemos hacerlo aun cuando los recursos sen pocos, teniendo que mostrar que somos parte de la solución y no la causa del problema”.
A continuación, el Ing. Mauricio Macri entendió que, hoy más que nunca, tenemos que extremar los esfuerzos en éste tipo de experiencias, dialogando e intercambiando las realidades, en vistas a conseguir y recrear la confianza, “nuevamente la Argentina está frente a una enorme oportunidad porque lo que pasa en el mundo nos genera condiciones de progreso sostenido por varias décadas, siempre y cuando logremos organizarnos y recuperar la confianza”.
Concluyentemente, aclaró que la Ciudad está dando sus primeros pasos para obtener una justicia autónoma, reclamando el traspaso de mayores competencias, “para poder sumarnos a éste esfuerzo compartido de todo el país, ya que hay mucho que podemos recuperar y mejorar”.
Luego, el Dr. Marcelo P. Vázquez aseguró que es preocupación permanente de jueces, miembros de los Ministerios Públicos y funcionarios judiciales, el repensar todo lo que haga a la optimización de la prestación del servicio de administración de justicia y al funcionamiento del poder del Estado que integran.
Por otra parte, indicó que vivimos en un mundo complejizado, donde las instituciones y el propio derecho se encuentran en crisis, por ende el respeto de la división de poderes de cada uno de los órganos de gobiernos del estado federal y provinciales “es el único camino razonable para la consolidación del sistema democrático, siendo indispensable el control de los actos de gobierno como contrapeso del poder estatal en defensa de los ciudadanos”.
Sin embargo, concluyó en que los inevitables conflictos que provoca la tarea de los jueces en la relación del Poder Judicial con los poderes político, como así también la crisis de legitimidad social y la distancia entre la justicia y la ciudadanía, “sólo será salvado con el respeto irrestricto de la ley, es decir a mayor conflicto, más derecho, mayor legalidad como respuesta”.
En primer termino, el Dr. Abel Fleming concordó con el Dr. Vázquez en cuanto a la necesidad de el afianzamiento y el desarrollo de la justicia local y el de la justicia en la ciudad pues “es un compromiso en el que está el Colegio de la Ciudad de Buenos Aires pero está la Federación y todo el país esperando que se concreten los hechos”.
Entre tanto, puntualizó en que hay dos aspectos que distingue éste acto de los anteriores, el primero es que en el estrado la Confederación convoca y da el lugar que deben tener las cabezas de las organizaciones asociativas de los Ministerios Público, Fiscales, Defensores y Asesores Pupilares.
Del mismo modo, estimó que la justicia argentina en la ingeniería de la construcción del diseño del sistema judicial en los códigos de procedimientos, “está virando hacia los modelos de justicia adversariales, de partes, en donde el acto final judicial es el resultado de una construcción colectiva, que se afianza o desafianza desde la acusación, la defensa o la intervención tutelar sobre la minoridad”.
En cuanto al segundo aspecto destacable del evento, remarcó que el encuentro se da entre la academia, los autores, los doctrinarios del derecho y la gente de la justicia, sin olvidar que la crisis institucional del 2001 cambio el eje, pasando a ser el Ministerio de Justicia de la Nación, que “permitió los diagnósticos sobre el sistema judicial argentino, para pasar a la nueva conformación de la nueva Corte Suprema de Justicia de la Nación, que colaboró en la construcción de un liderazgo, fortaleciendo el sistema, trazando vínculos y solidificándolos, definiendo un rumbo político”.
Finalizado el Acto de Apertura, se dio paso a una mesa de Debate, compuesta por los Dres. Miguel Ángel Caminos (Vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Magistrados), Ricardo De Felipe (Vicepresidente 2º de la Federación Argentina de Colegios de Abogados), José Valentín Martínez Sobrino (Tesorero de la Asociación de Magistrados de la Justicia Nacional), Rubén Lobos (Vicepresidente de la Federación Argentina de la Magistratura), Rafael Francisco Gutiérrez (Presidente de la Junta Federal de Cortes y Superiores Tribunales de Justicia de las Provincias Argentinas y de la CABA), Elena Highton de Nolasco (Ministra de la Corte Suprema de Justicia de la Nación) y Abel Fleming (Presidente de la Federación Argentina de la Magistratura).
La primera en tomar la palabra fue la Dra. Highton de Nolasco, contó que se está profundizando las políticas de estado del Poder Judicial, no sólo en materia de expedientes sino también realizando actividades en torno al acceso a la justicia, con la gente que no tiene expedientes ya que es muy mínima la parte de los conflictos reales que lleva al sistema judicial.
Asimismo, el Dr. Rafael F. Gutiérrez homenajeo a los jueces fallecidos, dejados cesantes sin el debido proceso, víctimas del avasallamiento de distintos sectores políticos, y a todos aquellos con los que hay compartido, aun a costos personales e individuales, la lucha por la independencia del Poder Judicial.
De esta manera, aceptó que el poder tiene dos funciones, una jurisdiccional, propia del juez, y otra de cabeza de gobierno, y a su vez, es necesario “tomar conciencia de que si el país no entra en un estado de seriedad institucional nos resultará difícil seguir avanzado, más allá de los esfuerzos institucionales”.
En consecuencia, el Dr. Miguel Ángel Caminos recordó que hace unos años nuestras instituciones no actuaban mancomunadamente y “comprendimos a tiempo, en la crisis, que teníamos que cambiar nuestra postura, no podíamos ser poderes silenciosos porque otorgábamos aquellos que nos criticaban, que teníamos que aprender a enfrentar a los poderes políticos con el idioma de éstos, que debíamos hacer política judicial y abandonar esa posición reactiva para tomar posiciones proactivas”, marcando un liderazgo, el de la Corte Suprema, como nunca antes hubo en la nación.
En tal sentido, el Dr. Fleming dijo que el 2010 pueda ser que nos de la oportunidad del tratamiento de algunas leyes estructurales que permitan acelerar las reformas judiciales, “una de ellas para que el Estado Nacional tenga una posición de garante en los entandares mínimos de justicia en todo el país, no puede ser que un ciudadano por haber nacido en una provincia del norte o en el conurbano bonaerense tenga distinta calidad de respuesta en materia de observancia o de restablecimiento de algún derecho vulnerado”.
Posteriormente, el Dr. Lobos dijo que uno de los problemas más graves, que hacen a la credibilidad del Poder Judicial, está dada por la necesidad de enfrentar la batalla por la opinión pública, buscando en los distintas reuniones, discusiones y jornadas para privilegiar aquellos puntos consensuados y aparecer en el escenario publico en una postura de propuesta.
Seguidamente, agregó que, personalmente, imagina a la justicia de los próximos años, “fortalecida, vigorosa, madura y fundamentalmente unida en una concepción común del los problemas y de como debemos solucionarlos”.
A su turno, el Dr. De Felipe puntualizó que la reforma del Consejo de la Magistratura, a nivel nacional, es un tema prioritario sumamente importante para lograr la independencia del Poder Judicial, “de hecho la Federación tiene iniciada una acción declarativa de inconstitucionalidad contra la ley que hoy se encuentra vigente, por ende consideramos que la reforma merece un primordial tratamiento en la futura agenda de la justicia, respetando los principios básicos”.
Así, aseveró que debe haber un control, en el ámbito de la justicia federal, de la matricula y la regulación de su tribunal de disciplina, y también es importante tener un acceso vía internet, no sólo de mejorar los equipos en los distintos juzgados sino un plan estratégico de gestión, que responda a una mejor celeridad de los procesos y una mejor publicidad, para que toda la ciudadanía tenga una rápida resolución de sus conflictos”.
Acto seguido, el Dr. Martínez Sobrino concordó con la idea de la reforma de la ley actual del Consejo de la Magistratura, sin olvidar “la restitución o el restablecimiento de la presidencia del Consejo de la Magistratura a la presidencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación como cabeza del poder”.
Concluyentemente, señaló que “los nuevos tiempos exigen que haya un mejoramiento edilicio e informático para poder llegar a todos los sectores de la sociedad y que los integrantes de ésta, puedan acceder a la justicia dignamente”.