VIH-SIDA: A 30 años de la epidemia en la Argentina. Desde el desconocimiento a la educación. Salud, respeto y derechos.
El Observatorio de Salud de la Facultad organizó el pasado 17 de octubre la jornada “VIH-SIDA: A 30 años de la epidemia en la Argentina. Desde el desconocimiento a la educación. Salud, respeto y derechos”. Participaron como expositores Patricia Angeleri, Laura Lenzi y Kurt Frieder. La actividad fue coordinada por Anahí Propatto.
En primer lugar, Patricia Angeleri expresó que en la Argentina aproximadamente hay 110.000 personas viviendo con VIH. “A través de distintas estimaciones podemos contabilizar el número de personas que estarían viviendo con VIH”, reseñó. Así, determinó que la Argentina no presenta una epidemia en forma homogénea, sino una epidemia concentrada. “Algunos saben y otros no saben que viven con VIH, probablemente porque no se hayan hecho análisis y no tengan síntomas”, remarcó. En este sentido, manifestó que es una enfermedad desconocida y novedosa para la historia de la medicina, ya que es la primera enfermedad en donde en la misma generación vemos aparecer un virus nuevo afectando a determinadas personas. “La mayor cantidad de personas notificadas se concentraba dentro de las edades medias de la vida, afectando más a los varones. En cambio, desde el año 2011, sectores que antes concentraban menor cantidad de personas infectadas hoy concentran un poco más”, diferenció. Asimismo, señaló que el fenómeno del VIH se ve aparecer en personas más grandes, lo cual no se conocía al principio de la epidemia. “Hoy estamos viendo afección de gente de más edad”, recalcó. Al principio de la epidemia era mucha la gente joven que se enfermaba y la cual fallecía porque no había tratamiento, debido a que se desconocía la enfermedad, mientras que hoy en la actualidad se está diagnosticando gente mayor de 45 años. En lo que respecta al diagnóstico del VIH, distinguió el escenario de las mujeres del de los varones, ya que las mujeres acuden más al sistema de salud por controles médicos. Para finalizar, indicó que de las 110.000 personas que viven con VIH, un 30% no sabe que viven con la enfermedad. “Si uno no tiene prácticas para proteger al otro, y si yo no me protejo, proteger al otro es difícil, por lo cual van a seguir apareciendo nuevos infectados”, finalizó.
Seguidamente, Kurt Frieder manifestó que la infección es controlable, aunque no es erradicable. “Lamentablemente todavía no hay una vacuna en el horizonte”, subrayó. Así, entendió que controlar la epidemia requiere un nuevo enfoque que tiene que ver con la prevención y el tratamiento. “En Argentina hay aproximadamente 50.000 personas que desconocen la situación. Hay un número muy importante de personas que por algún motivo no son visibles”, advirtió. De esta manera, aseveró que el SIDA es un problema sanitario grave a nivel mundial, afectando a 35 millones de personas que viven con la enfermedad. Además, evidenció que en la Argentina hay entre 14 y 15 nuevos casos de infección por día, muriendo entre 3 y 4 personas. “Todos debemos comprometernos, ya que la única forma que podamos parar esta epidemia va a ser a partir de informarnos y educarnos”, aseguró. En Argentina, la epidemia se sostiene, pero está concentrada en algunos colectivos especiales, distribuida en todos los aglomerados urbanos. “En la Argentina el VIH es una epidemia urbana”, declaró. Hacia el final, describió que la Fundación Huésped es una organización argentina, que tiene alcance regional y la cual trabaja desde 1989 en áreas de salud pública desde una perspectiva de derechos humanos. “Trabajamos no solo en VIH-SIDA, sino en otras enfermedades transmisibles, y en salud sexual y reproductiva”, recordó. Concluyó que la meta de la fundación es una sociedad equitativa, saludable y sustentable, que tenga acceso a los servicios y derechos humanos, en donde sean garantizados los derechos de la salud para todos.
Por último, la doctora Laura Lenzi diferenció al VIH del SIDA. Por un lado, el VIH es el virus de inmunodeficiencia humana, el cual ingresa al cuerpo y afecta el sistema inmunológico del mismo. Por el otro lado, las personas que tienen SIDA son aquellas que no han podido frenar el avance del virus y ya tienen el sistema inmunológico debilitado. Asimismo, indicó que las vías de transmisión son tres: por la vía sexual, la vía sanguínea y la vía vertical, es decir, la transmisión de la madre al hijo durante el embarazo, el parto o la lactancia. “Se comprobó que la leche materna también tiene una determinada cantidad de virus que hace que se pueda transmitir al bebé”, demostró. De esta manera, aclaró que las personas con VIH pueden concebir y tener hijos sanos, con un tratamiento adecuado y sin amamantar a los hijos, en el caso de las madres con VIH. En cuanto al área de promoción de derechos, la doctora explicó que la Fundación Huésped recibe consultas diariamente y brinda un servicio jurídico integral y gratuito. “Hoy en día, este servicio es necesario, porque una de las peores situaciones en relación al virus en 2014 es que sigue existiendo estigma y discriminación para las personas que viven con el virus”, manifestó. De este modo, indicó que atienden todos los días a personas que por diferentes motivos ven vulnerados sus derechos por tener VIH. “Las personas con VIH tienen los mismos derechos. No hay derechos ni permisos especiales, sino que la normativa que existe es para garantizar la igualdad”, concluyó.
“Las personas con VIH tienen los mismos derechos. No hay derechos ni permisos especiales, sino que la normativa que existe es para garantizar la igualdad”, concluyó Laura Lenzi.