Seminario sobre Derechos del Niño “Salud y derechos del niños”
En el marco del seminario sobre derechos del niño, el pasado 25 de noviembre tuvo lugar la última reunión que fue dedicada al tema “Salud y derechos del niños”. Abordaron la cuestión Máximo Soto (en representación del Programa integral de acción comunitaria en barrios vulnerables de Extensión Universitaria de la UBA) y Javier Indart (Jefe de Unidad del Hospital Pedro de Elizalde). También estuvieron presentes Celeste Castiglione y Florencia Ramos.
En primer término, Máximo Soto trató la salud y los derechos del niño en barrios vulnerables a través de su experiencia en el Programa integral de acción comunitaria creado en el año 2008. En tal sentido, explicó que se trabajó dos años con pequeños emprendimientos y resaltó la colaboración de las Secretarías de Extensión de las 13 Facultades de la UBA. También se refirió a las distinciones otorgadas por la Ciudad de Buenos Aires y el Gobierno Nacional.
Por su parte, Javier Indart centró su exposición en la atención brindada en el Hospital Elizalde a niños víctimas de violencia. Así, consideró que un equipo especializado debe abordar las situaciones de violencia intrafamiliar, analizando la situación particular. También, resaltó que en los primeros años de vida se establecen los modelos básicos y el modelo vincular para que un chico tenga los recursos psíquicos y sociales para poder enfrentarse a situaciones diversas.
Además, postuló que la estructura de la familia es muy conflictiva por los vínculos emocionales intensos entre sus miembros, la cuestión reside en cómo se resuelve. Precisó entonces las formas de violencia infantil, de género y a la tercera edad, observando que existen dos problemas con el maltrato, ya que hay dificultades para diagnosticarlo no se deriva a un centro especializado. “Las situaciones de violencia se incrementan en intensidad y frecuencia en la medida que no se traten”, expresó. Como formas de maltrato infantil, distinguió la verbal, la emocional, la física, por omisión, la sexual, por negligencia y abandono; también diferenció la violencia personal de la colectiva y la autoinfligida. Hizo referencia también al maltrato institucional, que surge de cualquier legislación, procedimiento, actuación u omisión procedente de los poderes públicos o bien derivada de la actuación individual de los profesionales que comporte abuso, negligencia, detrimento de la salud, la seguridad, el estado emocional, el bienestar físico, la correcta maduración o que viole los derechos básicos del niño y/o la infancia.
“Las situaciones de violencia se incrementan en intensidad y frecuencia en la medida que no se traten”, expresó Javier Indart.