Protección de consumidores en entornos digitales
El pasado 19 de mayo, el Centro de Graduadas y Graduados organizó esta jornada que contó con la participación de Débora Tatiana Marhaba Mezzabotta, Ricardo Parra, Yamila Marian Castagnola, Emiliano Estevarena, Gala Nuñez, Natalia Eva Torres Santomé y Sebastián Barocelli.
En primer lugar, Sebastián Barocelli describió el tema de la ponencia: “Como ustedes saben, los entornos digitales son espacios vibrantes, dinámicos, y que en los últimos tiempos tienen una actualidad significativa, y que, en el tiempo de pandemia, ha puesto especialmente de relieve y ha incidido en nuestras vidas en diferentes ámbitos. Las relaciones de consumo no están exentas de esas incidencias, es por eso que, en este marco, hemos intentado delimitar aquellos impactos que tienen los entornos digitales en las relaciones de consumo”. Y sumó: “Queremos establecer normas y principios para la responsabilidad de los operadores que operan en los entornos digitales, y analizar también diferentes circunstancias que se ven desplegadas en los entornos digitales”.
En tanto, Débora Tatiana Marhaba Mezzabotta explicó la publicidad efectuada por medio de los/as influencers: “Cuando nosotros nos ponemos a pensar en la idea de un influencer podemos pensar que personas famosas siempre existieron. Son líderes de opinión, personas a las cuales el público de una sociedad caracterizada por el espectáculo podían seguir e imitar. Pero lo cierto, es que en las nuevas estructuras, llamadas plataformas, y a través de la popularización de internet, estos personajes encuentran un lugar donde desarrollar y ampliar su campo de actuación”. Asimismo, remarcó que “estas personas no son reconocidas, generalmente, por algún oficio, arte, o conocimiento, sino que lo que se produce es una popularización a partir del uso de imágenes, y haciendo recomendaciones de determinados productos”. Y agregó: “Esto no se podría explicar si nosotros reflexionáramos un poco respecto de lo que es el entorno digital. Este tiene una connotación propia que es la aceleración, ya que es todo una especie de momento y tiempo inmediato, un tiempo donde no hay un plazo donde nosotros podamos reflexionar, sino que somos usuarios del solo clic”.
A continuación, Gala Nuñez habló sobre las fintech. “Básicamente, son empresas que se dedican a ofrecer servicios y productos financieros a través de medios y plataformas digitales, dentro de las fintech tenemos un universo, un ecosistema y por eso hablamos de universo fintech, que está formado por distintas verticales o distintos rubros”. Posteriormente, añadió: “Tenemos una amplia gama de servicios y productos que prestan estas empresas, y ahí aparece la discusión sobre la normativa y cuáles son las herramientas tuitivas y protectorias para los consumidores. Allí aparecen los distintos organismos de control que tienen que fiscalizar la labor de estas empresas, y nos encontramos también con el desafío de que, hoy en día, no tenemos una regulación específica ni toda la información que necesitamos para proteger a los consumidores, y para proteger también a los inversores que quieren apostar por este tipo de herramientas”.
A su turno, Yamila Marian Castagnola expuso sobre las tensiones que se dan entre el Derecho de los Consumidores y el Derecho de la Propiedad Intelectual en los entornos digitales: “Ninguno de nosotros puede desconocer el hecho de que las transformaciones del entorno digital y la aparición de nuevas herramientas tecnológicas, han formado una nueva manera de crear y proteger los llamados bienes culturales, y que han traído determinados impactos en el marco de los derechos de creación y de protección de estos bienes culturales, no necesariamente negativos pero que sí nos exigen una reflexión”, manifestó. En relación con lo anterior, explicó que “de la misma manera que la producción y el consumo se han incrementado esto ha traído aparejado el hecho de una mayor democratización en el acceso a los bienes culturales y la necesaria pregunta en torno a los límites de la apropiación”.
Emiliano Estevarena se refirió a la confianza del consumo electrónico en las plataformas que utilizan un sistema de puntuación. Y retomó los planteos de Rachel Botsman sobre la confianza. “Vamos a hablar de las tres etapas de la confianza; en primer lugar está la confianza local, luego la confianza institucional y por último, la confianza distribuida. La local sería como la confianza que tenemos entre nosotros, un grupo de conocidos que si alguien llega a hacer algo mal queda excluido del grupo, pero las sociedades crecen, se complejizan y todos nos volvemos extraños, entonces algún sistema tiene que mediar entre nosotros para garantizar la confianza”, expuso.
Para concluir, señaló que “lo que tenemos en estas plataformas de comercio electrónico son sistemas de confianza mixto, donde tenemos confianza institucional en la marca que nos hace de árbitro desde la plataforma como intermediario y del usuario con el que vamos a contratar en particular”.
Para finalizar la jornada, se realizó un ciclo de preguntas entre el público y los/as expositores/as.