Presentación del libro "La gestión pública. El presupuesto judicial en las cuentas nacionales. Innovaciones hacia una gestión de calidad"
Héctor Daniel Marchi
Héctor Daniel Marchi
Alejandro Gómez y Héctor Daniel Marchi
Alejandro Gómez y Héctor Daniel Marchi
Juan Vicente Sola
Juan Vicente Sola
Presentación del libro
Presentación del libro
Presentación del libro
Presentación del libro
El 8 de abril se presentó en el Aula Magna el libro “La gestión pública. El presupuesto judicial en las cuentas nacionales. Innovaciones hacia una gestión de calidad”, de Héctor Daniel Marchi. La actividad contó con la presencia del director del Centro de Derecho y Economía de la UBA, Juan Vicente Sola, el Secretario Técnico de la Facultad, Alejandro Gómez y Fernando Sagarna, en representación de editorial La Ley.
Para comenzar, Alejandro Gómez destacó la iniciativa y el esfuerzo demostrado en la realización de interesantes propuestas de innovaciones hacia una gestión judicial de calidad. En ese sentido, añadió: "seguramente resultará de gran provecho detenernos para reflexionar acerca de cuestiones de gran trascendencia para la actualidad de la administración de justicia en nuestro país".
Luego, el profesor Juan Vicente Sola entendió que la Constitución establece la división de poderes en el freno y contrapeso. Dentro de ellos, se supone que existe la autonomía financiera y la autarquía, la cual nos permite hacer posible la verdadera separación de poderes. De esta manera, aseguró que hay una cooperación entre los poderes, la cual trata el libro de Marchi, en donde aparece la idea de relación directa entre el Poder Judicial y el Poder Legislativo.
Seguidamente, señaló el carácter cíclico de la economía y la posibilidad de que haya
menos recursos en aquellos ciclos. “Si hay menos recursos para el Estado, habrá menos recursos para el Poder Judicial”, afirmó. Así, Sola manifestó que hay que pensar qué hacer cuando se produce la caída de recursos e identificó a las reservas como la respuesta al problema, las que definió como la alternativa a los ciclos de la economía. Por lo tanto, imaginar a un órgano de administración sin reservas sería poner en peligro el ejercicio del Poder Judicial. “Las crisis tienen un efecto contracíclico. Cuando hay menos recursos, hay mas utilización del Poder Judicial para resolver conflictos”, remarcó. De este modo, añadió que la principal tarea del Poder Judicial es asegurar la vigencia de la división de poderes y los frenos y contrapesos. “Sin el control judicial de ellos, los derechos son solamente una ilusión”, agregó.
Sola resaltó también la importancia que tienen las políticas públicas para la estabilidad. Sin embargo, analizó que hay una tendencia a la inestabilidad política en los cambios de Gobierno. De esta manera, concordó que las decisiones de inversión se toman de acuerdo a la estabilidad de las normas.
Asimismo, examinó el capítulo del libro que hace referencia a la gestión pública. “Son simples medios para poner en ejercicio y acción lo que está en la Constitución. La gestión pública es poner en vigencia el plan de la Constitución”, citó. En tal sentido, habla de los nuevos paradigmas de la gestión, en donde menciona al modelo empresarial, debido a que el Estado es una empresa, la cual consta de una cantidad de medios para cumplir ciertos fines de interés general. Puntualizó que el autor presupone que la cuenta de inversión debe hacerse en distintos períodos, y no solo al final del mismo. “El presupuesto está para ser cumplido, y debe tomarse con seriedad”, subrayó.
Finalmente, Sola enfatizó que el problema de la autarquía existe en nuestro sistema debido a una base de desconfianza. “La falta de colaboración de los poderes hace que tengamos que escribir claramente las reglas de convivencia”, evidenció. Insistió en que el presupuesto no puede ser un obstáculo para la administración de Justicia, ya que debe tener la flexibilidad suficiente para poder cumplir sus objetivos. De este modo, enumeró que la ejecución errónea del presupuesto acarrea problemas concretos: malos edificios, ineficiencia operativa, mala comunicación y gastos de mantenimiento excesivo.
Para concluir, opinó que el libro tiene la ambición de proponer un país mejor, que no solo describe sino que esgrime propuestas para el futuro como, por ejemplo, la revisión de la coparticipación, el equilibrio entre el sector público y el privado, la estabilidad de las normas y la clara definición de las políticas públicas.
Hacia el final de la presentación, tomó la palabra el autor Héctor Daniel Marchi, quien explicó cómo se maneja el modelo empresarial y enfatizó que, aunque no es sencillo llevarlo a cabo, resulta ser el mejor paradigma. “Siempre se maneja con controles. No existe manera de trabajar sin controles”, comentó. En cuanto a las características del modelo, Marchi detalló que se maneja con superávit fiscales, con una política ordenada de gastos y de endeudamientos, con una política ordenada de recursos, con la constitución obligatoria de reservas, con un control obligatorio interno y externo de la organización, con normas de transparencia y responsabilidad fiscal y con una administración orientada hacia la calidad total.
El autor aseguró que la autarquía presupuestaria no existe, ya que ella refiere a la autarquía económica. “La autarquía financiera no se puede utilizar si uno no tiene la autarquía presupuestaria”, aseveró. Propone en su obra modificar la ley de autarquía del Poder Judicial, fijando una relación directa entre el Poder Judicial y el Congreso en cuanto al presupuesto, estableciendo el control obligatorio de la Auditoria General de la Nación y acentuando una adherencia de todos los poderes a una Ley de Responsabilidad Fiscal.
Finalmente, Marchi reconoció la importancia de construir políticas económicas y políticas fiscales en base al consenso y a la construcción, sabiendo que todos tenemos que cooperar y ayudarnos.
“La falta de colaboración de los poderes hace que tengamos que escribir claramente las reglas de convivencia”, evidenció el profesor Juan Vicente Sola.