Presentación del libro Solidaridad entre generaciones. Aportes animalistas y ambientalistas para su estudio
El pasado 6 de julio, en el Salón Verde, se presentó el libro Solidaridad entre generaciones. Aportes animalistas y ambientalistas para su estudio, de Gonzalo Perez Pejcic (compilador). La actividad fue organizada por el Proyecto UBACyT 20020170100489BA: “La Solidaridad Intergeneracional: su proyección teórica y práctica en la prevención del daño ambiental” y el Materia CPO: “Animales como sujetos”. Expusieron: Gonzalo Perez Pejcic, Lidia M. R. Garrido Cordobera, Micaela Anzoátegui, Agustina Churba y Matías Yohai. Florencia Mourier moderó la actividad.
Primeramente, y a modo de apertura, Gonzalo Perez Pejcic resaltó que la obra presentada era “fruto de un profundo trabajo intelectual”, señalando que “no es sencillo realizar tareas de investigación en nuestro país”. También explicó que publicar el libro fue un desafío ya que, en sus palabras, es “la primera obra de su estilo en el derecho argentino”, porque propone “algo que hasta el momento nadie ha propuesto en el campo jurídico, que es repensar la ética y el derecho ambiental desde la ética y el derecho animal”.
Luego, Lidia M. R. Garrido Cordobera dedicó su ponencia a explicar la prevención del daño ambiental, con un enfoque histórico, y aplicándolo a la protección y accionar de las generaciones futuras. Se refirió a la época en que inició su trabajo sobre cuestiones ambientales, destacando la aplicación del artículo 2499 del Código Civil derogado, que incluye el concepto de acción de daño temido. “Una acción propia del derecho real que yo consideraba aplicable para prevenir daños a bienes comunes, siendo bienes comunes aquellos considerados cosa comunitaria, o cosa pública”, planteó. Sin embargo, señaló que alude a “aquellos bienes que no forman parte exclusiva de ninguno de nosotros: el aire, la tierra, los recursos, los otros seres vivos”. En ese sentido, analizó cómo este tipo de bienes no eran considerados valiosos económicamente y cómo ciertas actividades como la tala de los bosques, actos depredatorios como pesca, cultivos intensivos, no eran comprendidos dentro de la categoría de daño.
En este punto, Gonzalo Perez Pejcic retomó la palabra para exponer sobre las bases para un Derecho Ambiental con perspectiva antiespecista, donde se destaca una pregunta inicial: “¿De qué hablamos cuando hablamos de derecho ambiental?”, ofreciendo una respuesta sencilla. “Es el conjunto de normas dictadas por autoridad competente, que contienen el derecho de cada individuo a un ambiente sano, equilibrado y apto para el desarrollo”, aclaró. Tras esto explicó los principios rectores del derecho ambiental, destacando el de solidaridad entre generaciones. “Son estos principios los que orientan a las normas del derecho ambiental y guían la interpretación de los jueces”, sostuvo.
A su turno, Agustina Churba dedicó su ponencia a la soberanía alimentaria desde el feminismo antiespecista. Para comenzar, definió al feminismo antiespecista como un pensamiento que “exhibe la inconsistencia de rechazar un único tipo de discriminación, el de las mujeres, al mismo tiempo que se perpetúan otros tipos de discriminación, por ejemplo, el especismo, que es la discriminación en base a la especie”. Además, se refirió a la soberanía alimentaria. “Se introduce en la Cumbre Mundial de la Alimentación que se llevó a cabo en 1996 por la Organización de las Naciones Unidas para la alimentación y la agricultura. (…) Y se define como el derecho de los pueblos a alimentos nutritivos, culturalmente adecuados y producidos de forma sostenible y el derecho de los pueblos a decidir su propio sistema alimentario productivo”, postuló.
Por su parte, Matías Yohai analizó el capítulo del libro que indaga sobre la necesidad de legislar un tipo penal para la tala de bosques. Retomó el artículo 41 de la Constitución Nacional. “Prevé que todos los habitantes tenemos derecho a un ambiente sano, equilibrado y apto para el desarrollo humano y que las actividades productivas que satisfagan las necesidades de nuestra generación tienen también que tener en mira a las generaciones futuras”, señaló. “Lo que está expresando es básicamente el principio de solidaridad intergeneracional”, añadió. Posteriormente, mencionó la Ley General del Ambiente y la Ley de Presupuestos Mínimos de Protección Natural de los Bosques Nativos.
Por último, Micaela Anzoátegui se refirió a la cuestión de interés acerca de las generaciones futuras más allá del antropocentrismo, tratándolo como una cuestión contemporánea. Asimismo, realizó un análisis del capítulo de la obra atinente al tema.