Presentación del libro Crónicas de Alfonso. 40 años de democracia
Raúl Mariano Alfonsín, José Ignacio López, Roberto Suárez y Cristina Carreras Lobo
En el Salón Rojo, el pasado 19 de abril, se realizó la presentación del libro Crónicas de Alfonso. 40 años de democracia. Expuso el autor, Roberto Suárez. Organizó la actividad la Cátedra libre Democracia y Estado de Derecho "Dr. Raúl Alfonsín". Participaron de la mesa: Raúl Mariano Alfonsín, Cristina Carreras Lobo y José Ignacio López.
Primeramente, Cristina Carreras Lobo señaló: “Poder contar con este tipo de libros que recogen lo que fueron las experiencias, vivencias, y posturas de Alfonsín es para destacar. Es una figura que antepuso el bienestar de todos y la democracia por sobre los intereses de unos pocos. Seguimos recogiendo sus valores y coraje”.
A su turno, José Ignacio López agradeció la presencia y destacó: “Celebro que Roberto haya resuelto ampliar y volver a presentar este libro. Tuve la oportunidad de poder conocer a Alfonsín en persona y fue mi mayor vivencia. Desde ese momento, me mantuve junto a él”. Asimismo, entendió: “Su legado no fue sólo su conducta y su vida, sino también su último discurso. Creo que eso es lo que hoy tenemos que invocar. Si hoy nosotros volvemos a leer esas palabras, veremos cuán agravadas están esas deudas de la democracia. La crisis moral y diligencial es la misma. Tenemos entonces que cambiar el clima en el cual vivimos. Hasta que no asumamos y compartamos el fracaso que tenemos encima, no vamos a avanzar. La política es construcción compartida”. Por último, manifestó: “Recuperemos la memoria de aquellos años, de ese discurso. El consenso del presente es difícil. Nuestro desafío es el consenso del futuro para ver qué país queremos tener”.
A continuación, Roberto Suárez caracterizó la obra: “El libro se llama Crónicas de Alfonso porque sin dudas tiene que ver con el periodismo. Los cronistas somos los historiadores del presente. Rául ejerció el periodismo para después ser un gran escritor. La película ‘Argentina 1985’ produjo un debate y trajo su figura. Por eso, nace esta idea de la segunda edición” y agregó “ante los 40 años que cumple la democracia, es bueno recordar lo que pasó antes de 1983 para poder revalorizar mejor lo logrado y traer a la memoria la introducción del estado democrático. Alfonsín asume en una gran crisis institucional y económica. La mayoría del pueblo lo reconoce como el padre de la democracia”. Posteriormente, hizo referencia al libro El Planisferio Invertido Pablo Gerchunoff:“Es un texto que va a quedar por mucho tiempo, es una biografía asombrosa con un gran recorrido por la historia política”.
Por otra parte, afirmó: “Estos 4 decenios han constituido y consolidado la etapa democrática más profunda y duradera de toda nuestra historia. El pueblo recuperó la soberanía, la voz, y el voto. Aquel inolvidable 30 de octubre de 1983 llegó la libertad para los ciudadanos, la consagración de los derechos humanos, el reconocimiento a las identidades colectivas y sus consiguientes derechos y cultura, la separación de poderes, el gobierno de la mayoría y el respeto de las minorías. Abrimos un camino para otros países latinoamericanos”.
Para finalizar, reconoció: “Reflejé en este libro la situación de deuda de la política con el pueblo, pero con la satisfacción de haber cumplido con el objetivo final, la llegada de la democracia. Que tengamos por delante todavía asignaturas pendientes debe ser incentivo de cambio y no motivo de depresión colectiva. La democracia que concebimos sólo puede afianzarse a través de la ética de la solidaridad” y adicionó “hoy presento esta nueva edición sosteniendo que me siento orgulloso de haber seguido siempre su pensamiento moderno. Su gran herencia fue que se puede ser presidente sin enriquecerse, se puede llegar a la función pública para servir y no para servirse, y se puede ser gobernante para acercar y también para equivocarse”.