Presentación de la propuesta de estatuto para la creación de una corte penal latinoamericana y del Caribe contra el crimen transnacional organizado (COPLA)
Presentación de la propuesta de estatuto para la creación de una corte penal latinoamericana y del Caribe contra el crimen transnacional organizado (COPLA)
El pasado 6 de noviembre se llevó adelante en la Sala del Consejo Directivo la presentación de la propuesta de estatuto para la creación de una corte penal latinoamericana y del Caribe contra el crimen transnacional organizado (COPLA).
La introducción al encuentro estuvo en manos del director de la campaña para la creación de la corte, Fernando Iglesias, quien remarcó que la intención que se tiene es promover un instrumento institucional y jurídico de integración regional para combatir a las mafias, y Christian Cao, quien se desempeña como coordinador de redacción de la propuesta para la creación de COPLA. En este marco, Iglesias sostuvo que la actividad “es muy importante porque es un momento decisivo en la transición de lo que era una simple utopía a una política de Estado”. Sobre COPLA, indicó que es una corte de tipo penal del ámbito latinoamericano y del Caribe contra el crimen trasnacional organizado, según la definición establecida por la Convención de las Naciones Unidas al respecto. “Latinoamérica hoy en día es la región más violenta del planeta con picos que solamente pueden ser comparados con los peores países africanos”, manifestó.
Asimismo, afirmó: “La conclusión es que enfrentamos un problema que no es solamente de escala nacional, sino que es un problema de escala continental con características muy específicas que afectan a todo el mundo” y agregó que el proyecto de la COPLA es una forma de enforcement de la Convención de Palermo a nivel latinoamericano.
En representación del Ministerio de Seguridad de la Nación, tomó la palabra Gastón H. Schulmeister. “La creación de una corte penal como COPLA presupone la creación de una institución jurídica internacional encargada de perseguir, combatir y juzgar a los grupos criminales responsables de la comisión de delitos organizados trasnacionales, así como también entendemos que contribuye a la promoción de políticas de seguridad a una escala regional para una mayor y mejor cooperación en la lucha contra el crimen organizado”, desarrolló. Además, aseveró que, cuando se habla de crimen organizado, es necesario destacar que es un flagelo complejo, premeditado, con implicancias internacionales que no solo amerita, sino que demanda un compromiso global y mancomunado. “La respuesta conjunta de los Estados de Latinoamérica y el Caribe en una corte penal se presenta como una medida efectiva”, reflexionó.
Por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, disertó el director general de Consejería Legal, Mario J. Oyarzabal. “En los últimos años, las organizaciones criminales no solo han crecido y diversificado su actividad delictiva, sino que además han aumentado sus ganancias y poder”, comenzó diciendo. En esta línea, explicó: “Frente a ello, los Estados han tratado de brindar distintas respuestas y se han comprometido política y jurídicamente a cooperar para prevenir y combatir este tipo de delitos”. En este sentido, reflexionó que la creación de instancias internacionales constituye iniciativas valiosas destinadas a dar respuestas en el ámbito de los Estados de Latinoamérica y el Caribe, en este caso, al problema de la delincuencia organizada trasnacional en forma conjunta.
Más adelante, añadió que en la actualidad, la Convención de Palermo, de la cual Argentina es parte desde el año 2002, es el principal instrumento internacional para combatir el crimen organizado. “La posición del Gobierno argentino ha sido igualar la cooperación internacional en la lucha contra la delincuencia organizada trasnacional en la citada convención y sus protocolos”, reconoció.
A continuación, Juan José Benítez, subsecretario de la Subsecretaría de Política Criminal, se refirió a los asistentes como representante del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. “La creación de COPLA se inserta dentro de los ejes de trabajo que ha impuesto el presidente en la lucha contra el crimen organizado”, señaló. Luego recordó que se empezó a pensar en esta iniciativa en el 2016.
En cuanto a la COPLA, el subsecretario expresó que “a partir del trabajo de colaboración con distintos organismos internacionales que procuran llevar justicia frente a crímenes aberrantes y de lesa humanidad y delitos de criminalidad organizada, es que entendimos que era un excelente proyecto a los efectos de cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible n. º 16 de Naciones Unidas que nos imponen una sociedad pacífica, justa e inclusiva”.
Finalmente, Christian Cao expuso los lineamientos centrales del diseño de la COPLA. “Su nombre indica mucho. Es una corte que lo que busca es perseguir, en aras de obtener la paz y una vida mejor, los denominados tipos criminales organizados, que están especificados en el modelo y la propuesta del estatuto”, puntualizó. También, especificó que en la búsqueda de justicia hay dos cuestiones: “La primera es perseguir y condenar las actividades y hechos criminales y, como consecuencia, lo que se busca es el recupero de activos para buscar la reparación de la víctima”.
Seguidamente, contó que “la corte tiene una vocación de ser permanente. No será auxiliar, no será ad hoc, sino que busca tener una continuidad en el tiempo”. Sin embargo, a su vez será subsidiaria y complementaria. Describió, más tarde, que la propuesta tiene por finalidad perseguir a las cúpulas criminales y así permitir que en un primer punto actúe la justicia de los Estados parte y, cuando un Estado no quiera o no pueda perseguir estos crímenes internacionales, será esta corte la que asuma su competencia.
“La creación de una corte penal como COPLA presupone la creación de una institución jurídica internacional encargada de perseguir, combatir y juzgar a los grupos criminales responsables de la comisión de delitos organizados trasnacionales, así como también entendemos que contribuye a la promoción de políticas de seguridad a una escala regional para una mayor y mejor cooperación en la lucha contra el crimen organizado”, desarrolló Gastón H. Schulmeister.