México frente a la trata de personas. La labor consular
Con la participación como expositor de Alejandro Rene Molina Torres (encargado de la Sección Consular de los Estados Unidos Mexicanos), el pasado 14 de septiembre el Proyecto DeCyT “Análisis socio-jurídico y socio-económico de los recursos disponibles para la eficacia de la Ley de Trata de Personas” y el Departamento de Ciencias Sociales organizaron la conferencia “México frente a la trata de personas. La labor consular”.
Isabel Cristina González Nieves, Directora del DeCyT, coordinó la actividad y presentó brevemente al disertante. Luego, Andrea Gastron destacó que esta investigación requiere no solo mucha inteligencia en el tratamiento de los diferentes aspectos, sino también “mucha valentía para llevarla a cabo”. Asimismo, Rubén Donzis, Subdirector del DeCyT, hizo referencia a que esta es la segunda conferencia que se realiza dentro de este programa de investigación sobre análisis sociojurídico y económico de la problemática de trata. “Estamos trabajando más profundamente sobre los recursos que ofrece la ley de trata y si estos son eficaces y operativos”, adicionó.
Por su parte, Carla Ledezma Castro (México), afirmó, que si bien se da la explotación sexual, también existe la trata con fines laborales, con los trabajos forzados, “precisamente cuando alguien ubica a la víctima en una situación de necesitad, el tratante conoce esas falencias y se acerca a la víctima para poderla explotar como tal”, detalló. Asimismo, se da con fines de servidumbre o de matrimonio, cuando el matrimonio es forzado, o con el alquiler de vientres, entre otras formas de trata. Otro punto de la trata de las personas se vincula con el traslado de droga y con el tráfico de órganos. “La trata de personas afecta en su mayoría a las mujeres, niños, niñas y adolescentes, pero también a los mayores de edad y a los hombres en la forma de explotación laboral”, remarcó. Respecto al marco jurídico en México, hizo mención de la ley de prevención contra la trata de personas, promulgada en 2007. “Nosotros, como funcionarios, tenemos que tener la capacidad y la capacitación para poder entrevistar de cierta forma especial a las víctimas y a los sobrevivientes”, agregó.
A su turno, Alejandro Rene Molina Torres sostuvo que se trata de un problema que crece día a día y “quizá no conozcamos las dimensiones, tan grandes y profundas, del delito de la trata de personas”. Entre otras cuestiones, mencionó que en 2008 se creó en México una fiscalía especial para este tipo de delitos. “Esta fiscalía fue muy importante en nuestro país porque involucraba a todas las secretarías del ramo del gobierno mexicano”, indicó. Hizo alusión a que se trata de un delito difícil de identificar, porque no es fácil que las personas que están siendo objeto de este delito den a conocer que están pasando por estas circunstancias. “Se encuentran en una situación de total estado de desprotección”, analizó. Del mismo modo, explicó que el gobierno mexicano capacita a los funcionarios para que la persona que tiene este tipo de afectación sea tratada de una manera especial, con relación a la información que les tienen que proporcionar a los funcionarios. “Lo primero es tratar de identificar perfectamente cuál es el delito que se le ha cometido a la persona”, consideró.