Los otros juicios de Núremberg
En el Salón Rojo, el pasado 22 de agosto, se llevó a cabo la actividad "Los otros juicios de Núremberg", organizada por el Centro de Derechos Humanos y el Departamento de Derecho Penal y Criminología. Expuso: Alberto Luis Zuppi (abogado argentino y doctorado magna cum laude de la Universidad del Sarre en Alemania; fue Robert & Pamela Martin Professor of Law, en el Paul M. Hebert Law Center de la Universidad de Luisiana en los Estados Unidos). El encuentro contó con reflexiones y preguntas a cargo de la profesora Natalia Luterstein.
En este evento, Alberto Luis Zuppi, autor de la obra Los Otros Juicios de Núremberg, compartió su análisis y reflexiones sobre los doce juicios que siguieron al principal juicio de Núremberg. Estos juicios, llevados a cabo por Tribunales Militares norteamericanos, abordaron casos clave como los experimentos médicos en campos de concentración, los llamados "tribunales populares" nazis, y los juicios contra industrialistas, las SS, y el ejército alemán.
Para comenzar, Alberto Luis Zuppi afirmó: “Jamás me hubiese imaginado las cosas que encontré en mi investigación”. Acto seguido, hizo referencia a las obras y a los juicios. Con respecto al primer juicio, planteó que “como pusieron a un representante soviético, cuyo país había cometido los mismos crímenes que los nazis”. Además, continúo desarrollando, las dificultades que encontró el tribunal, en juzgar a los procesados por crímenes de lesa humanidad, de los cuales. “No había antecedentes históricos en el Derecho”, señaló. Y agregó: “Cuestiones que después los jerarcas enjuiciados usaban en su defensa”. Otro tema al que aludió fue a la desaparición de las instituciones jurídicas dentro de Alemania, ya que una de las defensas alegaba que los crímenes debían ser juzgados por un tribunal del mismo país. “Todo aparato judicial estaba a manos de los ocupantes”, expresó. Remarcó, que dentro de las zonas de ocupación, que eran cuatro en ese momento, los juicios se llevaron a cabo en la zona norteamericana.
Por otro lado, comentó sobre el sistema norteamericano que “brindaba una variedad de garantías”. Sin embargo, explicó que la defensa se encontraba en una terrible desventaja. Esta idea la justificó en el hecho de que los norteamericanos contaban con más tecnología para la adquisición de la prueba. “Como el papel mecanografiado”, señaló. Esto lo llevó a hablar sobre como de los 200 enjuiciados, 20 fueron ejecutados condenados a la horca. Además de esto, grandes condenas de perpetuidad, que nunca se ejecutaron. “Para 1958, los jerarcas no ejecutados estaban libres”, recordó.
Luego de su exposición, se dedicó un momento a las preguntas del público.