Jornadas de actualización sobre derecho a la salud
"El largo camino hacia la efectividad de los derechos"
El 13 de septiembre en el Salón de Actos de la Facultad de Derecho tuvo lugar una jornada de actualización sobre derecho a la salud que contó con la disertación de Román Navarro, quien expuso sobre "El largo camino hacia la efectividad de los derechos". La presentación estuvo a cargo de Marisa Aizenberg, directora del Observatorio de Salud.
Román Navarro comenzó diferenciando los conceptos de eficiencia, eficacia y efectividad. En ese sentido, indicó que la eficiencia consiste en la maximización de los recursos, es decir, que con el menor costo posible se alcance un fin determinado; mientras que la eficacia implica simplemente alcanzar un resultado y la efectividad está relacionada con la meta misma. Por otro lado, destacó que en el ámbito jurídico, donde existe una norma estructurada en base a un presupuesto de hecho con su efecto jurídico, estas definiciones pueden variar. Por lo que la efectividad implica el cumplimiento en tiempo y espacio dentro del plano de la realidad del componente de hecho de ese efecto. Esta efectividad está relacionada con la justicia.
Recordó que el artículo 10 del Protocolo Adicional a la Convención Americana de Derechos Humanos en materia de derechos económicos, sociales y culturales establece que toda persona tiene derecho a la salud. Por lo tanto la efectividad de ese derecho consiste en que ninguna persona sea excluida del pleno goce de ese derecho. En situaciones de crisis del sistema de salud, se busca mayor eficiencia llevando a cabo una política de reducción de costos y dejando de lado el impacto positivo o negativo en la salud que se manifiestan a mediano o largo plazo.
Por otro lado, distinguió que el derecho a la protección de la salud se centra en la tutela de un bien jurídico mientras que la asistencia sanitaria privilegia los medios sobre los fines tendiendo, así, a una visión reduccionista. La asistencia sanitaria y el sistema de salud es solo un componente del derecho a la salud que influye sobre este hasta un 20%. Por lo tanto, no se pueden identificar ambos conceptos. Con las reformas de los años 90 en América Latina de los sistemas de salud se hizo énfasis en la cuestión de la asistencia sanitaria dejando de lado los determinantes ambientales, las condiciones macroeconómicas, los estilos de vida, las condiciones biológicas o genéticas. Por eso no es lo mismo que el derecho a la salud, ya que, a pesar de ser necesaria e indispensable, no es suficiente para dar una respuesta total al problema de fondo.
Las prioridades se han invertido ya que políticamente es muy rentable, cuando en realidad es más efectivo en términos de salud la atención primaria fundamental, la promoción y conservación. Centrarse sólo en asistencia sanitaria es un riesgo ya que se lleva casi el 90% de los recursos del sistema de salud, donde los hospitales aportan muy poco a la mortalidad ya que atienden a pacientes con enfermedades terminales.
Por último, destacó que aunque exista la garantía de un acceso universal al servicio de salud, está es completamente diferente en los sectores más ricos en comparación con la de los más pobres al igual que su educación, su forma de vida, su nutrición. Por lo tanto si se quieren atender los problemas de salud, se deben solucionar problemas de base, desigualdades sociales y económicas.
"El nivel de justicia social que vive la sociedad incide directamente en el estado de salud individual y colectiva de la población", resaltó Román Navarro.