Jornada de diálogos para la acción: tres crisis, múltiples miradas y posibles soluciones
Jornada de diálogos para la acción: tres crisis, múltiples miradas y posibles soluciones
El pasado 14 de octubre, en el Salón Azul, se llevó adelante la Jornada de diálogos para la acción: tres crisis, múltiples miradas y posibles soluciones. La actividad fue organizada en conjunto por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Embajada de Suecia en Buenos Aires, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, las Naciones Unidas Argentina y la Facultad. La apertura del encuentro estuvo a cargo de: Silvia Nonna, Valentín González, Ulrika Grufman, Corina Lehmann, Sergio Federovisky, Tamara Hahn y Gladys González.
Primeramente, Silvia Nonna, vicedecana de la Facultad, agradeció la elección de la Facultad como sede de la jornada y destacó la relevancia de la temática planteada: “El tema que nos convoca hoy es de suma importancia y con una mirada actual. Es evidente que los problemas ambientales están en la agenda de todos los estados, quizás con un poco de demora, pero somos muchos/as los que desde hace tiempo estamos trabajando, preocupándonos por este tema desde distintas perspectivas y con distintas posibilidades y necesidades”. Y sumó que “es un tema que está no solamente en la agenda de los estados, sino también en la agenda de la sociedad civil ya que hoy las cuestiones de los problemas ambientales son cada vez más evidentes y los sufrimos cotidianamente. Esta problemática sólo la podemos resolver en conjunto, por eso el compromiso es de todos”.
Seguidamente, Valentín González, representante del PNUD manifestó: “Es un orgullo para mí estar en este evento donde vamos a realizar un cierre de la Jornada Estocolmo+50, la cual tuvo por objetivo resaltar la importancia de estos temas para el desarrollo sostenible de la humanidad”. Asimismo, destacó: “Ha habido una toma de conciencia muy importante no sólo de parte de las autoridades sino también de la sociedad y sobre todo los jóvenes. Ahí es donde está la esperanza del planeta, de la humanidad, en que estos temas sean tomados en serio”.
A continuación, Ulrika Grufman se refirió a la Conferencia Estocolmo+50: “La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente Humano en Estocolmo fue la primera conferencia mundial en hacer del medioambiente un tema relevante. En junio de este año se celebró Estocolmo+50 que tuvo por idea centrarse en cómo cumplimos nuestros objetivos climáticos. El resultado fue la agenda de Estocolmo con diez convocatorias al mundo para acelerar el ritmo del cambio”. Por otro lado, se refirió a los lineamientos generales de la jornada: “Es un placer estar aquí presente en este encuentro que es una continuación de la Conferencia Estocolmo+50. Los temas que vamos a tratar hoy han sido temas importantes para Suecia por mucho tiempo. Entre los tópicos a debatir tenemos la crisis de la contaminación, la crisis del cambio climático y la crisis de la pérdida de biodiversidad”.
En la misma línea argumental, Corina Lehmann celebró la realización del encuentro. “Tengo la convicción de que los desafíos ambientales que enfrentamos deben ser abordados incluyendo las voces de todas las partes involucradas. Es un orgullo hoy poder tener varias de estas voces. La cooperación multilateral genuina y responsable constituye la respuesta para los desafíos grandes a los que nos enfrentamos”, expresó. Luego, puntualizó en la labor de los/as jóvenes en la construcción de la mirada ambiental. “Las futuras generaciones no son responsables de la degradación ambiental pasada, pero son especialmente vulnerables a ellas. Es por eso que la juventud ha tomado un fuerte impulso y esa actitud proactiva se celebra. La Argentina está comprometida con el multilateralismo ambiental”, señaló.
A su turno, Sergio Federovisky afirmó que “los humanos tenemos tendencias a hacer balances y mirar hacia adelante utilizando algunos aniversarios. El de Estocolmo lo merece, cincuenta años de uno de los eventos más importantes en la historia contemporánea”. No obstante, criticó los resultados actuales en la materia abordada: “Desde Estocolmo para acá hemos tenido varias herramientas, pero simultáneamente si miramos varios de los resultados reales, los concretos, lo que vemos no es alentador. Tenemos que admitir que en estos últimos cincuenta años hemos tenido una mayor cantidad de acuerdos, de convenios, pero una menor cantidad de resultados. Todos los indicadores en materia de contaminación, de cambio climático, de pérdida de la biodiversidad, están violados”.
Del mismo modo, Tamara Hahn sostuvo que “estamos atravesando una crisis global y sistémica sin precedentes. Al ser sistémica, se requieren abordajes sistémicos ya que no alcanza con reducir solamente nuestras emisiones de CO2. Cualquier solución parcial no es suficiente”. Asimismo, señaló: “Requerimos de cambios drásticos y urgentes y de acciones concretas. Como país y como sociedad global debemos hacer frente a esta crisis multidimensional que atravesamos. Las conclusiones de la Conferencia Estocolmo+50 se basaron en la necesidad de fomentar un diálogo genuino y respetuoso entre todas las personas. Por más pequeñas que sean las acciones individuales tienen la capacidad de cambiar el mundo”.
En último término, Gladys González planteó que “la agenda ambiental es una agenda absolutamente presente en el Congreso de la Nación, en el diseño de las políticas públicas. Es una agenda sumamente compleja en la cual los resultados no han sido los que necesitamos que sean. Sin embargo, esto nos lleva a pensar y reflexionar. No hay desarrollo posible si no hay desarrollo sostenible. Debemos ser conscientes de que todavía tenemos la oportunidad de generar este cambio”.