IX Seminario Internacional de Aprendizaje y Servicio Solidario
María Marta Mallea, Eduardo Barbarosch, Tulio Ortiz, Juan Carlos Tedesco y María Nieves Tapia
Por estos días, pareciera que todo aquello que la política y el derecho no han logrado solucionar, se ha puesto en manos de la solidaridad. Se trata, como su apariencia lo muestra, de colaborar en el bienestar del otro, de manera no-coactiva y económicamente desinteresada. La implementación de este mecanismo de ayuda, no tan nuevo por cierto, aunque en auge en nuestro país, viene cubriendo cada vez más aspectos de la vida cotidiana: la economía (responsabilidad social empresaria), la ciencia (bioética), la política (organizaciones no gubernamentales), etc. Tal es así, que quienes han adquirido cierta experiencia en la materia, vienen apostando fuertemente a la educación y formación de líderes para lograr, por un lado, la promoción del compromiso solidario y, por el otro, una mayor eficiencia en la gestión de proyectos destinados a tal fin.
Con ese objetivo, los días 12 y 13 de octubre el Ministerio de Educación de la Nación organizó, con el apoyo del Centro Latinoamericano de Aprendizaje y Servicio Solidario (CLAYSS) y en el marco del Proyecto Nacional Educación Solidaria, el IX Seminario Internacional de Aprendizaje y Servicio Solidario. La actividad se realizó en nuestra Facultad y tuvo en miras capacitar para optimizar el desarrollo de experiencias solidarias, propiciar el intercambio de ideas entre escuelas y universidades del Mercosur y Latinoamérica, y generar espacios de coordinación entre las entidades educativas y organizaciones no gubernamentales de la comunidad. El Seminario estuvo dirigido a directivos, docentes, estudiantes y líderes comunitarios de todo orden.
Para el acto de apertura, se hizo presente el Vicedecano de nuestra Facultad, Dr. Tulio Ortiz, quien dio la bienvenida a todos los asistentes. Destacó por sobre todo la creación de estos espacios tendientes a fomentar la solidaridad, por considerarla “tan importante y esencial para la organización de una nación y de una comunidad”. “No puede haber paz sin justicia, ni justicia sin solidaridad”, expresó, y reiteró las felicitaciones a los organizadores por llevar estas experiencias a la universidad, que es la casa de todos. Ç
Seguidamente, la Prof. María Nieves Tapia, coordinadora del Programa Nacional Educación Solidaria, agradeció también la concurrencia de los presentes y señaló que la verdadera actividad solidaria que existe en Argentina es invisible a los medios de comunicación. “Hemos documentado más de 15.000 experiencias, desarrolladas por casi 13.000 instituciones educativas de todos los niveles”, comentó la profesora, especificando que 34 de las 38 universidades nacionales están empezando a desarrollar casi 500 proyectos de voluntariado, financiados desde el Ministerio de Educación. “Son números que nos esperanzan” —transmitió al auditorio.
La coordinadora luego explicó que este seminario se concentra en lo que los pedagogos llaman “aprendizaje-servicio”: desarrollo y ejecución de proyectos de diseño al servicio de organizaciones solidarias. Históricamente, el 99% de la actividad solidaria comenzó con el inicio de la democracia, después de 1983. Sin embargo, el 48% recién tuvo un desarrollo considerable en los últimos dos años, luego de la crisis de 2001. Según una investigación desarrollada por CLAYSS en 2001, de un gran número de experiencias solidarias se extrajo que el 55% integraba contenidos curriculares que los emprendedores habían aprendido en las aulas y casi la mitad se realizaba en paralelo con el aprendizaje de contenidos solidarios. Al año 2006, el 93% de la totalidad de las experiencias, son prácticas que forman parte de la formación profesional de los estudiantes.
En ese sentido, la profesora Nieves Tapia sostuvo que las actividades de docencia e investigación científica están de alguna manera rompiendo paradigmas, puesto que son labores que están saliendo hacia la comunidad y se integran con la extensión. “Se aprende en y de la comunidad” —agregó. No se trata de proyectos de mera beneficencia sino de actividades que realmente modifican estructuralmente las situaciones.
Para dar comienzo al seminario, dirigió unas breves palabras el Lic. Juan Carlos Tedesco, Secretario de Educación de la Nación. “La solidaridad es imprescindible en el ámbito de la educación, puesto que allí se encuentran los pilares fundamentales en la formación de las futuras elites dirigentes de nuestro país”. Así, sostuvo que estamos transitando momentos en que la idea de “vivir juntos” no puede seguir sustentándose en las bases tradicionales de convivencia. “Antes estábamos obligados a hacerlo; pero hoy, para incluir al excluido hay que querer hacerlo” —enfatizó.
De esta manera, el Secretario explicó que hoy se está intentando desde lo político una estrategia más global, basada en la educación. “Debemos terminar con la idea de que lo único que rige es el mercado” —acusó. Por eso, las experiencias masivas de solidaridad aparecen muy saludables y se espera que se expandan y contagien al conjunto de la sociedad.
Finalmente, Tedesco recordó que actualmente se está debatiendo una nueva ley de educación, “que aspiramos a que sea una muestra de solidaridad, un ejemplo, un indicador, y una manifestación en la que haya un compromiso social masivo de todos”.