Entre lo real y lo imaginario: visiones interdisciplinarias sobre la antigüedad griega

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El 9 de noviembre se desarrolló en la Sala Vélez Sarsfield de esta Facultad de Derecho una jornada de especialización organizada por el Seminario Permanente de Investigación "Helenismo y Derecho: aportes, debates y tendencias". Resulta propicio recordar que tal seminario se encuentra bajo la dirección de José María Monzón, Profesor Adjunto de esta Casa, mientras que la coordinación del mismo corresponde a Rosana Gallo, Investigadora Adscripta del Instituto Gioja y Profesora Adjunta en esta Facultad. Para la ocasión, de la organización del evento también participó Emiliano J. Buis, profesor de esta Casa e Investigador del CONICET.

Estando a cargo de las palabras introductorias, el profesor José María Monzón señaló que uno de los principales motivos que alientan a la realización de actividades semejantes es la de poder devolverle las humanidades a la Facultad de Derecho. Adicionalmente, explicó que el seminario cumplirá en las próximas semanas cinco años desde su creación, algo que indudablemente merece ser celebrado.

El primer panel de la jornada estuvo orientado al estudio sobre las "Visiones interdisciplinarias sobre el mundo griego antiguo: apuntes desde la filología, el arte y la filosofía". Del mismo participaron Elsa Rodríguez Cidre, Investigadora del CONICET, con una exposición a la que decidió titular: "La mujer y la tragedia en la polis griega". Seguidamente, Cora Dukelsky, de la Facultad de Filosofía y Letras se refirió a los paradigmas femeninos en la cerámica griega. Este primer panel se dio por concluido con la intervención de María Cecilia Colombani, proveniente de la Universidad de Morón y de la Universidad de Mar del Plata, que expuso sobre: "Viaje, sabiduría y poder. Los sujetos excepcionales en el pasaje del mito al logos".

En lo concerniente al segundo y último panel, los participantes de este se abocaron analizar la antigüedad griega desde el pensamiento jurídico. Así, Rosana Gallo disertó sobre: "El prederecho en los orígenes del mundo griego" y Emiliano J. Buis sobre "Las mujeres y el derecho griego: presencias y ausencias femeninas en los tribunales de Atenas". Finalmente, Eduardo Magoja brindó una conferencia titulada "Oikos y polis: diversidad de sistemas jurídicos en la Grecia Clásica".

La conferencia de cierre estuvo a cargo de Mario Resnik, Director del Departamento de Derecho Público I, quien ofreció a la audiencia una visión del pensamiento helénico desde la Teoría General de Sistemas. Primeramente, Resnik expresó: “en esta Facultad a la que frecuento desde hace tantas décadas, y que no me animo a decir cuantas, la filosofía no existía como materia. En mi época yo creo que era impensado que un grupo de personas se hubiera reunido a profundizar en la filosofía clásica”. Además, tuvo ocasión para traer a la memoria de los presentes al maestro Carlos Cossio, quien “trajo aquí (a esta Facultad) una filosofía alemana actualizada”. Sin ahorrar elogios destacó que Cossio logró introducir el estudio de la filosofía a esta Casa de un modo moderno. “Aquí ya se hablaba de filosofía, pero era una filosofía medio como la que hacemos los abogados, que somos abogados y nada más, superficial, de mucha repetición, de decir siempre lo mismo y de caer en lugares comunes”, sentenció Resnik. Sobre este punto, concluyó que sin los aportes de Cossio, la filosofía del derecho tal vez se hubiese conformado con los postulados provenientes del ideario kelseniano. “El contacto que teníamos nosotros era más bien con la filosofía analítica […] y los griegos ahí no aparecían, lo helénico nada, no recuerdo haber leído o escuchado nada de esto”, explicó el orador.

También argumentó que la labor de Carlos Cossio permitió que nuestra Facultad se convirtiera en un ámbito fecundo donde pudiesen despegar otras mentes predilectas como las de Lucas A. Gioja o la de Carlos E. Alchourrón, sólo por mencionar algunos.

En lo concerniente a la llamada “Teoría de los Sistemas”, Resnik sintetizó que es “una respuesta nueva para problemas eternos”. Cuando nos embarcamos en la lectura de la filosofía clásica descubrimos, según el expositor, cómo los hombres se muestran sedientos de conocimiento, deseosos de saber y comprender. A lo largo de toda la historia universal, el hombre busca desesperadamente respuestas y la Teoría de los Sistemas surgida desde el siglo pasado es un intento por arribar a ellas. Admitió además que no siempre se logra una alta cuota de originalidad en la búsqueda de respuestas actualizadas a interrogantes que son permanentes. Agregó que resulta tarea no sencilla intentar despegarse de las respuestas que ya la filosofía ha proporcionado tiempo atrás. En caso de alcanzar tal desunión, Resnik argumenta que, de este modo, podríamos toparnos con innovadoras e inéditas respuestas que no necesariamente conserven el andamiaje de las anteriores.

“Una respuesta nueva para problemas eternos”, así definió Resnik a la Teoría de los Sistemas.