El rol del lenguaje claro en el acceso a la Justicia
El pasado 18 de septiembre se realizó la actividad "El rol del lenguaje claro en el acceso a la Justicia" en la Sala Vélez Sarsfield. Organizó el Departamento de Idiomas.
En esta ocasión, Silvia L. Bianco (consejera de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires y presidente de la Comisión de Fortalecimiento Institucional y Planificación Estratégica) expuso sobre el lenguaje claro y la Justicia de la Ciudad de buenos Aires.
Tras las palabras introductorias de Silvia Pedreira (subdirectora del Departamento de Idiomas) y Rita Tineo (directora del Departamento de Idiomas), Silvia L. Bianco comenzó diciendo que “a raíz de una encuesta que se hizo en el 2012, donde se obtuvieron diferentes resultados, se creó un programa que se llama Equidad Territorial”. Y agregó que “uno de los primeros resultados que arrojó la encuesta es que había muchas dificultades para comprender el lenguaje utilizado en el ámbito judicial”.
Seguidamente, enfatizó: “Para el lenguaje claro lo primero que tenemos que tener es empatía con la persona que tenemos adelante y lograr que nos comprenda”. Contó, en este marco, que “el equipo de lenguaje jurídico claro en el Consejo de la Magistratura hizo un documento que es el glosario jurídico en lenguaje claro, que es un compendio de aproximadamente trescientas palabras donde dan significados”. Asimismo, puntualizó que se buscaron extractos de diferentes fallos no solamente la Justicia de la Ciudad, sino también de Nación y la puesta en común fue el avance de la corrección grupal de las definiciones y la elección de los extractos de los fallos. “El segundo resultado que arrojó la encuesta fue el bajo nivel de identificación de las dependencias judiciales de la Ciudad de Buenos Aires, la gente no sabía que el Poder Judicial les podía brindar algún apoyo”, explicó y especificó que por este motivo “se creó un mapeo en Justicia que se puede ver a través de una aplicación en los dispositivos móviles para identificar los servicios de prestación de Justicia, los espacios en donde se pueden hacer denuncias y dónde hay asesoramientos gratuitos”. En esta línea, expresó: “Está pronta a salir. Es el segundo paso de Equidad Territorial. También va a tener un mapa y un directorio que será de distribución gratuita en todas las comunas de la Ciudad de Buenos Aires”. Además indicó que “el tercer resultado fue el bajo conocimiento sobre la existencia del Poder Judicial de la Ciudad. El 65% de los encuestados no sabía que existía un Poder Judicial local, ni una Constitución de la Ciudad de Buenos Aires”.
Por otro lado, detalló que “una comunicación está en lenguaje claro si la lengua, la estructura y el diseño son tan claras que el público al que está destinada puede encontrar fácilmente lo que necesita, comprender lo que encuentra y usar esa información”. Y se refirió al ámbito de aplicación: “Pueden ser documentos legales, administrativos, médicos o sentencias”. Y añadió: “No modifica el contenido de los documentos, no es una versión resumida, contiene la misma información, no cambia el registro de los escritos, no altera el propósito comunicativo de los textos y mantiene su fin”.
Luego Juan Pablo Mas Velez (vicerrector de la Universidad de Buenos Aires) brindó una serie de conclusiones. Para comenzar, se refirió a la obra Notas sobre derecho y lenguaje, donde Genaro Carrió sostiene que “si se quieren conseguir altos niveles de acatamiento a las leyes que dictamos lo que tenemos que hacer es elaborarlas en un lenguaje que sea el del común”. También recordó que “plantea que la fuerza explicativa de la norma produce el mismo efecto que una bombita cuando ilumina determinada superficie”. En este sentido, expresó: “Ilumina fuertemente en el centro, en el grueso del campo que estamos mirando pero va produciendo un degradé hacia el cono de sombras que enmarca ese haz de luz y en ese cono de sombras es donde por lo general se producen las cosas que a nosotros más nos interesan: es en la menor porción de superficie ahí donde la ley no alcanza a explicar con nitidez las conductas donde nosotros empezamos a desarrollar nuestro interés académico y profesional”.
Más adelante, se enfocó en el libro Sistemas normativos: introducción a la metodología de las ciencias jurídicas. “Hay algún nivel de exigencia de que el lenguaje que nosotros utilizamos a la hora de plantear un asunto ante un tribunal o ante una agencia administrativa, o incluso en una relación bilateral sin ninguna instancia pública que la medie, tiene que ser como reclamaban Bulying y Alchourrón posible de ser discutidos en términos de verdad”, desarrolló y reflexionó: “Es indispensable que nosotros repensemos nuestra intervención, relegitimemos el margen de acción que nos toque y le devolvamos al conjunto de los ciudadanos discusiones en términos tales que le sean asequibles y, por sobre todas las cosas, apropiables”.