El desafío de construir estadísticas sobre prisión. Sus límites y posibilidades desde una perspectiva de derechos humanos
Dentro del marco del Seminario Permanente del Centro de Estudios de Ejecución Penal (CEEP), el 20 de abril se realizó un nuevo encuentro en la Sala Vélez Sarsfield.
Tras una breve introducción por parte del director del CEEP Leonardo Pitlevnik, Hernán Olaeta, quien está a cargo del Sistema Nacional de Estadísticas sobre Ejecución de la Pena (SNEEP),explicó que la estadística penitenciaria tiene que ver con el nacimiento de la estadística criminal y se vincula con un discurso que fue en torno al cual nacieron estas primeras estadísticas, que es el discurso de la escuela positivista del siglo XIX. Entonces, “el nacimiento de la estadística penitenciaria y la primera organización que tienen estas tablas estadísticas, tienen que ver con un contexto teórico particular y con un contexto social y político muy particular. Estamos hablando del siglo XIX, estamos hablando de la proliferación de estudios científicos y, fundamentalmente, de un concepto muy novedoso para esa época que es brindar respuestas científicas a problemas sociales”, describió. Este concepto supone pensar los problemas sociales, como por ejemplo la delincuencia, no a partir de un dogma religioso, sino a partir de una línea científica. En este contexto, sostuvo el orador, es a partir del cual aparecen los primeros reportes estadísticos. En la misma línea, indicó que la estadística carcelaria tuvo que ver con este contexto y con la formación de las propias instituciones. Con relación a la aplicación de estadísticas en Argentina, contó que tomando los antecedentes que existían, algunos proyectos que se manejaron a nivel federal y provincial, se diseñó un instrumento de recolección de datos que básicamente parte de dos planillas, una planilla que llena cada unidad de detención (censo institucional) y otra planilla que se llena en virtud a cada detenido (censo penitenciario), que se completan una vez por año en todas las unidades de detención del país. “El censo penitenciario consiste básicamente en que una vez por año todas las unidades de detención del país llenen una planilla única, y esa planilla tiene una parte que es la más interesante, a nivel de análisis, que es la que se completa con la población detenida al 31 de diciembre”, puntualizó y añadió que este censo tiene características que lo hacen muy interesante y otras que lo hacen muy limitado. “Los límites del censo tienen que ver con la propia fuente, es información provista por cada unidad de detención y esto también tiene que ver con la fuente originaria, que es la estadística oficial que representa lo que cada agencia está registrando”, explicó con relación a los problemas del censo.
A su turno, Bernarda García, integrante de miembro del observatorio de cárceles federales de la Procuración Penitenciaria de la Nación, expuso que hace ya una década que se produce información cuantitativa. “La necesidad de generar estos datos viene un poco acompañada de la lectura que hacíamos del Sistema Nacional de Estadísticas sobre Ejecución de la Pena (SNEEP) como para complementarlo pensando sobre todo en las facultades que tenemos en la Procuración”, reconoció. Desde la Procuración, relató García, “nosotros trabajamos con tres tipos de datos que se originan en todos tipos de fuentes distintas. Por un lado, producimos información sobre fenómenos que son las líneas prioritarias del trabajo de la Procuración Penitenciaria y como tales conllevan la aplicación de un protocolo de actuación específico para cada uno de los casos. Los temas que trabajamos de esta forma son la tortura y los malos tratos, los fallecimientos en prisión y la realización de medidas de fuerza”. La forma de abordarlos, explicó, se origina a partir de la toma de conocimiento de alguno de estos casos y en los tres casos implican la toma de entrevistas con las víctimas y en los casos de fallecimientos con los compañeros del pabellón. Seguidamente, puntualizó que “desde la estadística lo que hacemos con esto es sistematizar la información, volcarla en la base de datos, procesarlos y hacer los informes”. Luego se refirió a los otros dos conjuntos que se analizan. El segundo conjunto de prácticas que relevan se vinculan con algunos fenómenos característicos de la vida intramuros y el tercer conjunto está compuesto de relevamientos temáticos que realizamos desde el observatorio de la Procuración.