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Año XXII - Edición 399 16 de noviembre de 2023

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Conferencia “La libertad en El único y su propiedad", de Max Stirner por profesor Aníbal D'Auria

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El pasado 26 de octubre, en el SUM del Instituto Gioja, tuvo lugar la conferencia "La libertad en El único y su propiedad, de Max Stirner, a cargo de Aníbal D'Auria, organizada por el Proyecto DECyT "Expresiones de la libertad" y el Grupo de Estudios de Comunalidades y Derecho (GECyD) – USP-T. Expuso: Aníbal D’Auria (abogado, licenciado en Filosofía y Doctor en Teoría Política, es profesor de Teoría del Estado y autor de varios libros y artículos, entre ellos El hombre, Dios y el Estado, contribución en torno a la cuestión de la teología política y El anarquismo frente al derecho). Elina Ibarra coordinó el evento.

Primeramente, Aníbal D'Auria comentó sobre el contexto en el que se publicó el libro y una serie de referencias de su autor: “A Stirner hay que ubicarlo en la Alemania de la segunda mitad del siglo XIX para entender su pensamiento. En 1842 nos encontramos en la crisis del idealismo hegeliano que era la filosofía imperante en la academia alemana”. En esa misma línea argumental, una de las primeras ideas que introdujo sobre la filosofía de Stirner, y que este plasma en su libro, es sobre el mundo natural y la reacción del hombre ante éste. “Está el mundo natural donde el hombre se esconde en el espíritu y luego se libera con la figura del individuo”, señaló. Asimismo, aludió a la sustitución de dios por parte del hombre. “Esta es otra filosofía que explora el libro, en la cual el hombre reemplaza a dios por otros dioses como la república, el socialismo y la anarquía”, indicó. En ese marco, se interrogó los motivos por los que es sustituido. “Son ideales que nos generan deberes, a los cuales el individuo se somete a un rol prescrito”, expresó. Seguidamente, abordó la categoría de liberalismo y distinguió tres concepciones de la misma. “El liberalismo político donde el hombre es el ciudadano y propietario, todo lo que está fuera de eso es vicioso. Luego está el liberalismo social que saca la centralidad del Estado y pone a la sociedad, la centralidad es el trabajador que colabora con su trabajo, el egoísta es el cual se queda con lo suyo”, remarcó. Sobre el tercer liberalismo, opinó que es el más complejo. “El liberalismo humanitario, que lo asocia con el concepto de humano más amplio, que sería la sociedad”, planteó y sumó que “el humano pleno es el cual contribuye a la humanidad. Sea poeta o trabajador”. Sobre lo sagrado, continúo citando a Juan Moreira, de la película de Leonardo Favio: “La tierra la tengo bajo mis pies”. “Yo cuando desmantelo todo lo que no es sagrado para mí, soy dueño del mundo. Yo mando sobre mí”, enfatizó. Por otro lado, avanzó con el libro y comentó que “parecería que a lo largo del texto se encuentran una serie de dicotomías. Una de ellas es sobre el egoísta que todo lo que hace lo hace por su propia decisión y no se niega a sí mismo. El mundo está lleno de locos y fantasmas”. Luego, se refirió a la siguiente dicotomía. “Que es la idea de sociedad y la asociación, uno no deja de ser un individuo, uno se junta en un grupo porque tiene algo que lo beneficia”, postuló. En ese sentido, mencionó que “la verdadera relación proviene de cuando uno se asocia por lo individual del otro”. Por otro lado, hizo referencia a la libertad de hacer. “Uno es más libre cuando trabaja en sociedad”, sostuvo. Para ejemplificar esta idea habló de la construcción de una casa. “Si uno trabaja con otros para construir una casa, va a tener mayor libertad de construirla que cuando lo hace solo”, opinó. “El poder es hacer”, concluyó. Tras la exposición, se habilitó una instancia de preguntas por parte del público.