A 50 años del Fallo “Brown vs Board of Education”
El pasado 5 de agosto tuvo lugar en el Salón Rojo de la Facultad, una conferencia en conmemoración del 50 aniversario del Fallo “Brown vs Board of Education” dictado por el Tribunal Supremo de los Estados Unidos. La reunión contó con la presencia del Dr. Robert James Cottrol (Profesor de Derecho, Historia y Sociología en la George Washington University de Estados Unidos de América), quien ofició en calidad de invitado especial. El acto, a su vez, fue introducido por la Dra. Viviana Kluger.
El famoso fallo al que se hizo homenaje, fue dictado el 17 de mayo de 1954 e intentó poner fin a la segregación escolar por causas raciales que imperaba hasta ese momento en Estados Unidos. Es por eso que para los ciudadanos de ese país constituye una conquista jurídica basal en la lucha por los derechos civiles, y significa para el resto del mundo un precedente ineludible en el fortalecimiento de los procesos constitucionales.
El Dr. Cottrol intentó explicar al auditorio el por qué de la importancia histórica del fallo, y para ello se remontó a los inicios de los problemas raciales en la vida social estadounidense; principalmente, hasta el final de la Guerra Civil en 1865, cuando la Enmienda XIII prohibió la esclavitud en ese territorio. El disertante mencionó que en realidad esa transformación formal ocultaba una profunda actitud discriminatoria hacia la población negra, y no se prestaba debida atención a la igualdad de derechos que profesaba la Enmienda XIV (1868) para todos los ciudadanos norteamericanos. Siguiendo con su relato histórico demostró cómo la influencia de las ideas del positivismo organicista-biologicista de fines del siglo XIX argumentaban contra la igualdad material debido a falsas diferencias relativas al color de la piel. Ese “racismo científico”, como él lo llamó, hizo que hasta los intelectuales apoyaran tal sinrazón y la divulgaran. Ese rechazo ilegal pero real hacia los descendientes de esclavos en la educación, se vio plasmado en el Fallo “Plessy vs. Ferguson”, de 1896, en el que se declaró que “las escuelas públicas ´separadas pero iguales´ son legales”; y así se abrió paso a una doctrina constitucional –de igualdad formal pero materialmente segregacionista- que hizo eco en el mundo durante varios años.
Sin embargo, ciertos sucesos internacionales empezaban a sugerir una apertura. El Dr. Cottrol puso el foco en dos hitos estructuralmente implosivos: las sucesivas Guerras Mundiales y el desarrollo de las Ciencias Sociales. Según él, el irremediable derrumbe del positivismo filosófico y el susto pedagógico que selló el holocausto nazi en el mundo occidental hicieron que la población blanca en Estados Unidos diera un vuelco respecto a las actitudes que ella misma había condenado. A su vez, el advenimiento de la Psicología freudiana y las relecturas sociológicas de la Escuela de Frankfurt penetraron fuertemente en las universidades estadounidenses cuestionando los factores represivos del inconsciente en el sujeto. El orador rescató también la complejidad que aportaron los estudios afroamericanos a la comprensión del pasado de esa colectividad, y la importancia que fueron ganando los hombres de tez negra en el Ejército.
Al referirse concretamente al fallo en cuestión, el Dr. Cottrol nombró a la NAACP (en castellano, Asociación Nacional para el Progreso de la Gente de Color) como la institución desde la cual comenzaron a diseñarse las estrategias para terminar con la segregación escolar. Fue a comienzos de la década de 1950 cuando surgió la necesidad de erradicar la discriminación de los estudios profesionales, sobre todo en el área del Derecho, ya que las diferencias culturales y oportunidades laborales resultaban muy dispares entre las escuelas públicas de blancos y las de alumnos negros. Así, apareció un caso en el Estado de Maryland donde la Corte dijo que “el derecho a estudiar en la universidad estatal es superior al de cualquier otra universidad”. A partir de allí, comenzó un aluvión de ataques a toda segregación en escuelas primarias y secundarias; y de a poco el Tribunal Supremo fue haciendo declaraciones importantes que serían luego aprovechadas para el caso “Brown”. Es por eso que para el Dr. Cottrol, el fallo “Brown” jugó el papel definitorio en una larga lucha contra las castas y la exclusión racial. La hoy mítica sentencia que se basó en estudios sociales dictaminó que “las instituciones educativas separadas son desiguales en forma inherente, ya que violan la XIV Enmienda de la Constitución de Estados Unidos”. De esa forma, tiró por la borda la famosa doctrina de “separados pero iguales”.
Finalmente, si bien se coincidió en el efecto positivo que la decisión causó en la sociedad estadounidense, el Dr. Cottrol no dejó de subrayar que el fallo “Brown” muchas veces ha servido –y sirve- para esconder las profundas desigualdades económicas existentes entre blancos y negros. Por eso, advirtió que la igualdad que profesa la legislación norteamericana aún dista de ser la deseada, y que la lucha debe continuar. En coincidencia con ese punto de vista, vale comentar que en los actos realizados en EEUU en conmemoración de los 50 años del fallo, el Presidente George Bush y el candidato electoral John Kerry, manifestaron en sendos discursos que, aunque se han registrado avances significativos en la materia, las escuelas de Estados Unidos están lejos de ofrecer las mismas oportunidades para todos.